El líder del PP exigirá la ilegalización del PCTV en la reunión del Pacto Antiterrorista
Los grupos se niegan a debatir las propuestas de Rajoy contra ETA
Zapatero sigue defendiendo la vía del diálogo para acabar con la violencia María
Ningún grupo parlamentario debatirá las propuestas de Rajoy para acorralar a Batasuna porque «ahondan en la división» y «no contribuyen a la unidad», según señaló anoche el portavoz socialista en el Congreso, Diego López Garrido. Éste se puso en contacto con los portavoces de todos los grupos, excepto el popular, para diseñar una estrategia común frente a una iniciativa que «tiene como objeto exacerbar la crispación y amplificar la absurda decisión de la dirección del PP de ir al choque frontal con el Gobierno y las demás fuerzas democráticas», según un comunicado difundido por el PSOE. Mariano Rajoy había anunciado que acudirá a la reunión del Pacto Antiterrorista convocada por Zapatero, «con contenidos y con propuestas». En concreto, con cinco proposiciones no de ley que su grupo presentará en el Congreso con el objetivo de «derrotar con la ley y el Estado de Derecho a ETA». La principal es iniciar el proceso de ilegalización del Partido Comunista de las Tierras Vascas. Según el líder del PP, «debería ser el compromiso más importante que asuma el Gobierno». Las otras cuatro son: comunicar al Tribunal de Estrasburgo que Batasuna sigue siendo ilegal, instar al Gobierno a que ordene a la fiscalía pedir la apertura de juicio oral y las máximas condenas en el caso Egunkaria, que persiga todas las actuaciones de Batasuna y la revocación de la resolución del Congreso que autoriza el diálogo con ETA. Previamente, el presidente había pedido al PP que acuda a la próxima reunión del Pacto Antiterrorista sin condiciones previas. Zapatero aseguró que una nueva tregua de ETA ya no sería «creíble», pero defendió la vía del diálogo como medio «para propiciar el abandono de la violencia». No, desde luego, de momento, pues tras el atentado en Barajas, «nadie se plantea un escenario de diálogo». Sin embargo, repitió la frase que ya pronunció en el debate del lunes y que es idéntica a la que empleó Aznar cuando ETA rompió la tregua en 1999, al decir que «el Gobierno ha hecho, hace y hará todo lo posible por buscar los caminos que conduzcan a una paz definitiva». Zapatero sugirió que debe seguirse con atención el debate interno que está teniendo lugar en la izquierda aberzale, después de que Arnaldo Otegi pidiera una «reflexión» sobre el contradictorio comunicado de ETA. En su opinión, esa declaración «no debe pasar desapercibida». Por su parte, Felipe González afirmó que José Luis Rodríguez Zapatero se equivocó al trabajar con la única hipótesis de que el proceso iba a «salir adelante y llegar a su fin». Indicó que en «la lucha contra estos criminales» hay que contemplar «dos, tres o cuatro» escenarios posibles. Juan Carlos Rodríguez Ibarra, señaló que «habrá que poner muertos cada semana» para impedir que Rajoy piense que el Gobierno está cediendo. Rajoy replicó al presidente del Gobierno, que le recriminó que acuda a la reunión del pacto antiterrorista con condiciones previas, que el PP irá a la reunión con «con contenidos y propuestas» y dijo que sus iniciativas son las que se derivan del acuerdo del 2000. «Yo no voy a una reunión para hablar de vidas y de derechos de los ciudadanos vacío de contenidos y con las manos en los bolsillos, así irán otros», declaró. Insistió en que Zapatero no ha cambiado de actitud ni ha explicado qué línea política seguirá en el futuro.