«Los incendios son el primer hito pero tendremos otras capacidades»

El comandante Ignacio Fernández-Miranda está al mando, de forma interina, del quinto Batallón de Intervención en Emergencias (Biem) con sede en la base que el Ejército de Tierra tiene en Ferral del Bernesga. Aunque es maño, conoce muy bien León ya que, a pesar de que ha tenido distintos destinos, su familia reside en León. Tiene 42 años, está casado con una profesora de la Facultad de Económicas de la Universidad de León y tiene dos hijos. Hace años estuvo destinado en el cuartel de Almansa y después de recorrer Zaragoza, Valladolid o Granada recae en uno de los destinos más importantes de su vida profesional cuya primera prueba de fuego serán los incendios forestales siempre, con la mirada puesta en Galicia. -¿Qué supone estar al mando del batallón más grande de la UME? -Desde el punto de vista personal es una satisfacción inmensa. No hay que olvidar que esta unidad está formada por personal muy formado. Dentro de las Fuerzas Armadas es una unidad con personal muy capacitado. -Precisamente la formación, ¿es uno de los pilares básicos de este contingente? -El personal se forma de manera contínua. Nada más incorporarse a cualquiera de los batallones pasa por un campamento básico de emergencias, que tiene lugar en Gerona. Está enfocado a la extinción de incendios pero también hacia otras cuestiones como actividades acuáticas o rescates en las que tendremos que intervenir. Allí reciben una capacitación básica a partir de la cual se desarrollan otras capacidades. Una vez que llegan al destino la formación sigue cada día. -El verano, ¿será la prueba de fuego de la UME? -El primer reto del batallón serán los incendios forestales. No hay que olvidar que, año tras año, ocurren siempre en nuestro país. Por tanto, el primer hito, la primera prueba de fuego, será nuestra capacidad para afrontar los incendios forestales. Concretamente nuestro batallón está orientado especialmente a la comunidad de Galicia, aunque nuestra zona de acción cubrirá también Castilla y León, Asturias y Cantabria. -Ha mencionado Galicia, ¿tendrá una atención especial? -La vigilancia será especial. Una de las primeras acciones formativas del batallón fue asistir a la oleada de incendios como observadores. Estuvimos tanto en las brigadas de extinción de incendios como en el centro de control de La Coruña y en Santiago de Compostela. Allí estuvimos observando como operaba el dispositivo contra incendios y vivimos, junto con ellos, los momentos más difíciles. Estuvimos de observadores pero principalmente aprendiendo. Serán las personas con las que trabajaremos este verano. -De haber existido la UME, ¿habría cambiado en algo la situación que vivió Galicia? -Es muy difícil saber lo que hubiera ocurrido con las especiales condiciones que se dieron el pasado verano en Galicia. Lo que si puedo decir es que si hubiéramos estado habríamos hecho todo lo que estuviera a nuestro alcance. -De todos modos, nunca ha existido un dispositivo tan grande ni tan preparado para hacer frente al fuego -La UME nace como instrumento del Estado para hacer frente a cualquier calamidad. Hasta ahora no existía una unidad estatal plenamente dedicada a situaciones de catástrofes, con medios y formación específica para hacer frente a estas situaciones. -¿Con cuanto personal contará este verano para hacer frente a sus primeras intervenciones? -En la actualidad, en Ferral hay 119 efectivos, a los que habrá que sumar alrededor de medio centenar que en la actualidad están formándose en el campamento de Gerona y que llegará aquí aproximadamente a mediados de febrero. Además, ya está en marcha una nueva convocatoria de vacantes que permitirá la incorporación de más efectivos antes del verano. Para entonces contaremos con más de 200 militares. -Además de los incendios, ¿a que más emergencias podrá hacer frente el batallón leonés? -Por un lado, las nevadas y las inundaciones. De hecho, después del verano, comenzaremos una fase de actuación en nevadas e inundaciones. También el material del que disponemos llega de acuerdo con estas necesidades. Así, hasta después del verano no tendremos el material acuático, ya que a partir de ahora nos llega el necesario para la extinción de incendios. También tendremos capacidad para afrontar riesgos sísmicos, derrumbres o corrimientos de tierra. -¿Cómo será el protocolo de actuación? -Las emergencias tienen una clasificación dependiendo del nivel en el que se solucionan. El cero, cuando los medios locales como protección civil solucionan el problema. El nivel uno es cuando la situación requiere de unos medios y una dirección superior, como es la de la diputación. En el nivel dos interviene la comunidad autónoma y el es en el tres cuando el Estado asume la dirección de la solución de una emergencia, bien a solicitud de la comunidad autonoma o porque el Estado decida que es la UME la que tiene que intervenir. Esta unidad nace como el brazo del Estado en las situaciones de emergencia. Para tener esa capacidad no se improvisa, hay que trabajarla día a día. Estamos sometidos a un proceso de formación muy intenso pero esa formación teórica y práctica hay que ponerla en marcha. Concretamente en el 2007, no es que sólo vayamos a actuar cuando se declare el nivel tres, sino que actuaremos desde el primer momento para obtener experiencia. Ahora estaremos para todo porque estamos formándonos. -Otra de las características de la UME es su capacidad de respuesta. -Así es, aunque dependerá del lugar al que haya que acudir. No hay que olvidar que nuestro campo de actuación es muy amplio. Los incendios son nuestro primer hito pero estamos preparados para cualquier emergencia del nivel tres. Incendios, nevadas, inundaciones, movimientos sísmicos, escapes nucleares o plantas químicas. Esa capacitación para intervenir en tantas situaciones distintas se irá alcanzando poco a poco. -Este batallón, ¿podrá intervenir fuera de su ámbito de actuación? -Las zonas de actuación de los batallones no son rígidas, todo lo contrario. En un momento dado, en una determinada actuación, primero irá el más cercano pero si estamos comprometidos en otra emergencia, la UME tiene plena capacidad para movilizar todas sus unidades en cualquier punto del territorio nacional. -¿Tendrá medios aéreos? -La sede de helicópteros e hidroaviones estará en Torrejón, pero, si se requiere su presencia, nos podrán recoger aquí o en la base aéreas de La Virgen, con quien mantenemos unas excelentes relaciones y nos han ofrecido su colaboración. También trabajaremos con el Centro del Fuego y contamos con el apoyo de las organizaciones civiles que se dedican a las emergencias.