Equipos de adultos se especializarán en salud mental infantil

La estrategia de salud mental de Castilla y León, aprobada en el 2003 por la Consejería de Sanidad, prevé la creación de una unidad de psiquiatría infantil y juvenil de referencia para toda la comunidad. El documento base de la atención psiquiátrica en la comunidad reconoce la «necesidad de implementar programas ad hoc, especializando a algunos integrantes de los equipos de atención a adultos en la asistencia a los problemas de salud mental de la población infanto-juvenil». En este sentido, subraya que la relevancia de actuar con la población infantil y juvenil «no sólo viene determinada por la importancia de dar una cobertura asistencial al grupo de edad, sino por la trascendencia que una atención de calidad y una intervención eficiente pueden tener sobre el futuro de la persona». Los objetivos de la atención específica a la infancia y a la juventud son «facilitar el desarrollo psíquico, personal y social, y sobre todo, prevenir el desarrollo de psicopatología en la edad adulta». Entre las particularidades de este tipo de asistencia se encuentran las diferencias en los fármacos empleados y sus dosis en relación con los de las personas adultas, la mayor relevancia de la actuación en el ámbito escolar y familiar y las diferencias en los instrumentos de detección de psicopatología, entre otras. La coordinación sociosanitaria, tan demandada desde las asociaciones de personas afectadas por enfermedad mental, es reconocida en la estrategia de salud mental de Castilla y León como de «especial interés» respecto a la población infantil. Para ello es necesario -agrega- «un adecuado nivel de coordinación entre los servicios sanitarios y otros dispositivos tales como los equipos psicopedagógicos de educación, los servicios sociales y, particularmente, los de protección a la infancia y reforma» que no disponen de recursos para atender a niños con trastornos mentales.