Implicados 66 españoles en una red internacional de pornografía infantil

La Policía austríaca, en colaboración con Interpol y Europol, ha desmantelado una gran red de pornografía infantil por Internet en la que están implicadas 2.361 personas en 77 países -66 de ellas en España-, según revelaron ayer fuentes policiales. El coronel de la Policía Federal austríaca de lo criminal Gerald Hesztera dijo que la noticia se ha difundido desde Austria porque ha sido este país desde donde se llevaron a cabo las investigaciones preliminares. Por su parte, el ministro austríaco del Interior, Günther Platter, declaró en rueda de prensa que la operación Pulga, como se denomina oficialmente este caso, es la mayor descubierta en Austria de pornografía infantil. Este es «uno de los más horrendos delitos. Es importante que el público no lo ignore, sino que actúe», apuntó Platter, tras subrayar que el contenido del material confiscado muestra «los más graves abusos sexuales contra niños». Hasta el momento se desconoce el destino de las víctimas y si los autores de estos abusos sexuales, que se supone que se produjeron países de Europa del Este, ya han sido detenidos. El mayor número de sospechosos corresponde a EE.UU., con 607 personas, seguido de Alemania, con otras 406; Francia, con 114; España, 64 y un número no precisado, pero menor, de 15 países latinoamericanos. En Austria, ya han confesado su culpabilidad 14 de los 23 sospechosos, entre los que hay estudiantes, escolares, trabajadores, funcionarios y jubilados. En julio del 2006 llegaron los primeros indicios que condujeron al descubrimiento del caso, al denunciar el propietario de un servidor de Internet en Austria que habían sido cargados en su sistema ocho vídeos pornográficos por piratas cibernéticos. En sólo 24 horas, este material fue descargado por más de 8.000 usuarios, sin que el administrador del servidor tuviera conocimiento del contenido pornográfico del material, indicó la policía austríaca. Este banco de datos estaba conectado, a su vez, a un vínculo de una página rusa en la red, donde los vídeos se ofrecían para ser descargados en Internet. Esta página de Internet fue cerrada inmediatamente y que el ministerio obtuvo la lista de usuarios que habían accedido a ella, lo que condujo a su identificación. Las autoridades han confiscado 31 ordenadores personales, siete computadoras portátiles, 23 discos duros externos y otros sistemas de almacenamiento de datos, así como 1.132 DVD, 1.428 disquetes y 213 videocasetes con un total de 8 terabytes de material pornográfico infantil. «Los vídeos fueron producidos posiblemente en Europa oriental», conjeturó Harald Gremel, responsable de investigar la pornografía infantil en el ministerio del Interior y al frente de la operación Pulga. Gremel precisó que van en aumento los esclarecimientos de casos relacionados con la pornografía infantil en países del Este europeo y que hace pocas semanas se creó una unidad especial similar a la austríaca en Moscú para su investigación. Las cifras de este negocio ilegal son difíciles de determinar, pero para dar una idea de su magnitud dijo que en pruebas simuladas de compra en Internet se halló una página en la que los usuarios pagaban 89 dólares (68,7 euros) por su acceso.