Diario de León

La Guardia Civil encontró ayer el cadáver del chico, que enterró a sus progenitores en el jardín

Un joven alemán se suicida seis días después de descuartizar a sus padres

Vivían en un pueblo de Tarragona y, según los vecinos, eran frecuente las discusiones

Miembros de la Guardia Civil custodian la propiedad de la familia muerta

Miembros de la Guardia Civil custodian la propiedad de la familia muerta

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efe | barcelona

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Alexander N., un joven de origen alemán de 19 años, se suicidó el jueves en su casa de lujo de Alcanar (Tarragona), seis días después de descuartizar y enterrar en el jardín a sus padres, al parecer tras un arrebato provocado por una discusión familiar. El joven parricida, que no tenía antecedentes penales ni era un chico conflictivo, según han explicado a Efe fuentes de la investigación, actuó con una gran brutalidad en contra de sus progenitores, a los que descuartizó sin piedad, dejando abundante sangre y restos humanos en la casa, en la que siguió viviendo durante seis días, hasta que ayer por la mañana se suicidó. Los padres, un matrimonio alemán formado por W.J.N., de 57 años, e I.N., de 46 años, vivían en una lujosa mansión en la calle Alberedes de la urbanización Serra Mar de Alcanar Platja. Al parecer, según las primeras investigaciones, tras una discusión familiar «debido a las diferencias que habitualmente hay entre padres e hijos», el parricida tuvo un «arrebato» y el pasado 23 de febrero mató a sus padres, a los que posteriormente descuartizó y enterró en el jardín de su casa. Los vecinos de la lujosa urbanización no oyeron ningún ruido extraño, en parte debido a que la casa familiar es muy grande y esta bastante aislada. Fueron los trabajadores de la empresa Nillus de Amposta, propiedad del matrimonio, los que se preocuparon porque el matrimonio no daba señales de vida, por lo que a principios de esta semana se pusieron en contacto con el parricida, que les dijo que se habían ido de viaje. Al no dar credibilidad a las explicaciones del hijo, los trabajadores de la empresa, dedicada a la fabricación de compresores, avisaron a la Guardia Civil, que a última hora se personó en la mansión, descubriendo un escenario dantesco, con la casa llena de sangre y de restos humanos descuartizados por todas partes. Los agentes de la Guardia Civil encontraron también el cadáver del joven, con un tiro de escopeta en la cabeza, que según todos los indicios se disparó por la mañana. Al salir al jardín, los agentes encontraron enterrados más trozos descuartizados de los padres del parricida. Una familia normal El primer teniente de alcalde de Alcanar, Ricard Bort (PSC), ha explicado que la familia era «aparentemente normal», aunque eran frecuente las discusiones y ha agregado que este parricidio ha conmocionado a esta tranquila localidad de las Tierras del Ebro, con poco más de 9.600 habitantes empadronados. Varios agentes de la brigada judicial de la Guardia Civil rastrearon durante toda la jornada de ayer la mansión buscando documentos y sacando huellas dactilares para buscar más pistas que puedan ayudar a esclarecer este truculento suceso. Según fuentes de la investigación, no se ha encontrado ninguna nota de suicidio del joven parricida. El juzgado de guardia número 2 de Amposta, que se ha hecho cargo de la investigación de este macabro caso, ha decretado el secreto del sumario. Con estas tres muertes se eleva a siete el número de personas fallecidas en circunstancias violentas en Cataluña en los últimos diez días.

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