El hermano de un huido confirma que uno de los presuntos autores escapó de Leganés

Ibrahim Afalah se cruzó en la noche del 3 de abril de 2004, día en que siete terroristas se suicidaron en Leganés, con Abdelmajid Bouchar, al que la Fiscalía acusa de ser uno de los terroristas que colocó las bombas en los trenes. «Me dijo que había huido del piso, que estaba bajando la basura y que se escapó al ver a la Policía», afirmó ayer. Su declaración estrechó el cerco de pruebas que pesan sobre el acusado, ya que entre los restos de la explosión se encontraron varios huesos de dátiles y aceitunas con su perfil genético. Su situación, sin embargo, dio un giro después, ya que la única testigo que dijo haberle visto en los trenes no pudo identificarle. Afalah, hermano de otro de los supuestos autores materiales, explicó que era el día de su boda y se dirigía a la mezquita cuando se encontró con Bouchar. Éste, según su relato, le contó que había subido la comida a los siete islamistas y que al descubrir a los agentes lió corriendo.