Los pasajeros del «Sinfonía» pagaron 3.000 euros para acabar devueltos

La mayoría de los más de 80 bolivianos que embarcaron -al precio de 3.000 euros por cabeza- en un crucero de lujo en Brasil con la intención de bajarse en España vieron truncarse su sueño. Sólo cuatro, con billete de vuelta, pudieron desembarcar en Cádiz. El resto fueron trasladados desde Génova -destino final del Sinfonía- a Madrid, desde donde tomaron un vuelo para su país. Setenta y nueve aterrizaron ayer en el aeropuerto de Santa Cruz, donde no tenían ganas siquiera de relatar su aventura. «Otro día, por favor, estamos cansados», fue todo lo que dijeron algunos. «Tuvieron que vender sus casas para pagar los pasajes. Ahora vuelven a Bolivia, donde no tienen nada, a empezar de cero», explicó un familiar de once de estas personas. El mismo desánimo ha cundido entre 1.500 compatriotas que pagaron hasta 3.000 dólares para volar con la compañía Lloyd Aéreo Boliviano (LAB) y que se han quedado sin poder viajar a España y sin dinero después de que la aerolínea cancelase los vuelos a España, tras la detención de tres altos cargos por haber vendido presuntamente más billetes de los que podían ofrecer.