Un programa experimental de respiro ofrece centros de noche y de vacaciones

La Junta de Castilla y León implantará a lo largo de este año un nuevo programa de respiro con carácter experimental en la provincia, que consiste en la oferta de plazas en residencias de ancianos para estancias nocturnas y para permanencias de varios días, «con lo que se completa el círculo de atención en régimen de estancia diurna que prestan las asociaciones leonesas». Así lo adelantó ayer Antonio Sáez, que destacó que las asociaciones dispondrán de una media de cinco plazas para estas estancias temporales. El gerente de Servicios Sociales de la Junta señaló durante la presentacion del Centro de Atención Integral de León que se está realizando un esfuerzo especial en la dotación de equipamiento en la provincia, especialmente en los centros rurales como el que ya está en funcionamiento en Astorga, con 25 plazas; o el que se ultima en Santa Marina del Rey, que contará con 40 plazas de estancia diurna, las mismas que el Centro de Día de Ponferrada. También se lleva a cabo el centro de Valdepolo, que tendrá 15 plazas. Sumadas a estas están las 85 de los dos centros de día que la asociación gestiona en León, lo que supone «un refuerzo importante de la red de atención al alzhéimer en León», explicó Sáez. La Junta tiene previsto también subvencionar la adquisición de dos vehículos de transporte adaptado colectivo para las asociaciones de León y Villablino. El responsable de Servicios Sociales de la Junta destacó la importancia del movimiento asociativo en relación con estas enfermeades en la provincia, que cuenta con ocho asociaciones en las localidades de León, Astorga, Cistierna, Ponferrada, Santa Marina del Rey, Villablino, Aldea del Puente y La Bañeza. La comunidad destinará a lo largo de este año un presupuesto total de 1,2 millones de euros en mantenimiento de las plazas de estas asociaciones, lo que supone un incremento de alrededor del 35% sobre el ejercicio anterior. Cobertura de residencias Sáez explicó también que León ha avanzado sensiblemente en la dotación de plazas en residencias de la tercera edad, desde la posición de retraso en la que inició la legislatura. «Actualmente tiene una dotación de 4,6 plazas por cada cien personas mayores de 65 años, muy cerca de las cinco que recomienda la OMS», explicó el gerente. En los últimos años se han puesto a disposición de los ancianos 347 plazas nuevas en colaboración con los ayuntamientos, 185 plazas para estancias diurnas y otras 213 plazas concertadas con centros privados. «Son alrededor de 750 plazas que permiten avanzar en los parámetros recomendados», indicó.