Cerrar

El último taller con empleados despidió a dos en febrero y el tercero va a jubilarse

Publicado por
A. Núñez - león
León

Creado:

Actualizado:

La última industria del Val de San Lorenzo con trabajadores por cuenta ajena, Textil Maragata SL, despidió a dos de sus tres empleados y mantiene al último a la espera de la jubilación. El taller sigue activo gracias a la familia, que sigue atendiendo las últimas máquinas y se resiste a echar la trapa, aun a costa de sostener un negocio ya casi insignificante. La deriva es similar al de otros muchos talleres de la comarca, que han quedado reducidos a dimensiones poco más que domésticas, muchas veces con maquinaria heredada de los abuelos para la que ya no se encuentran ni piezas de recambio. Según el propietario de otra enpresa familiar, Laurentino de Cabo, que dice tener tanta documentación como memoria de la crisis del sector, la ruina viene de siglos atrás, no de décadas. «Entre los años sesenta y ochenta pasamos una buena época porque teníamos más de setenta talleres artesanos, que luego fueron cayendo hasta quedar ahora apenas nueve, eso contándolos con los dedos, pero es que en 1920 teníamos 112 y, según el censo de 1752 hubo hasta 181 maestros artesanos», eso sí, no todos con local o industria propia. El propietario de «Artesanía Laurentino de Cabo», con nombre, tienda y taller que no deja lugar a dudas sobre las dimensiones del negocio, heredado de su padre, mantiene la fabricación, las materias primas y practicamente los mismos mercados. «La lana de aquí es la segunda mejor del mundo por la fineza de las ovenas merinas, que yo traigo de Maraña, cerca de Riaño. ¿Mercados y productos? Mi padre iba por todas las ferias, desde Cacabelos hasta el último rincón de la provincia y yo hago lo mismo, porque es la única forma de vender: pones calidad, un trabajo y dedicas a esto toda la vida. Nadie te ayuda y los jóvenes no quieren seguir, así que esto puede durar lo que esta generación».