ALINA DELIA | CIUDADANA RUMANA
«Me gusta León, espero encontrar un buen trabajo»
La joven de Sibiu, capital cultural europea junto con Luxemburgo desde el 1 de enero, cuenta que en su país se debaten los pros y los contras de la entrada en la UE
En vísperas de la entrada de Rumanía en la Unión Europea, Alina Delia, de 21 años, decidió empezar una nueva vida en León, España. Acababa de terminar estudios equivalentes al bachillerato y su familia no le puso trabas: «Me dijeron que ya era bastante grande y podía decidir lo que quería. En mi país casi todos los jóvenes se van a Alemania, España, Italia», explica. Llegó en noviembre y es una de las 1.335 personas de nacionalidad búlgara y rumana que han solicitado el documento comunitario. Después espera encontrar alguna oferta de trabajo para poder solicitar el permiso correspondiente: «Me gusta León y espero encontrar aquí un buen trabajo, aunque tenga que empezar desde cero; espero hacer un curso de administración y encontrar algo», asegura en su incipiente castellano (es alumna del programa de español para extranjeros de Cruz Roja). Es optimista y tiene confianza porque «soy joven y tengo tiempo por delante». Ella cree que la entrada en la UE será beneficiosa para su país, pero allí escuchó muchas discusiones al respecto: «Unos dicen que será bueno por la libertad de viajar y otros que todo será distinto y más caro». Ahora lo que más echa de menos es su casa, la familia: «Nunca había estado tan lejos durante tanto tiempo». Así que espera el verano para poder viajar a Rumanía. Procede de Sibiu, que, desde el 1 de enero, es capital cultural europea junto con Luxemburgo. Ciudad de origen medieval, que tiene actualmente unos 185.000 habitantes.