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| Reportaje | En la «Nasa» española |

Siva y sus hermanas Alba y Diana

El equipo que ha desarrollado el sistema de vigilancia del Ferral trabaja ahora en la creación de un simulador de amenaza real para gran cantidad de armas actuales y futuras

Publicado por
Marco Romero - torrejón de ardoz
León

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Un inmenso hangar -a mediados del siglo XX fue considerado el edificio de hormigón más luminoso de Europa- acoge las pruebas de montaje del sistema de vigilancia Siva, ideado y desarrollado por un equipo permanente de quince personas desde finales de los años 90. La nave es uno de los 80 edificios enclavados en el complejo donde opera el Inta, un espacio cerrado de 500 hectáreas situadas junto a la Base Aérea de Torrejón de Ardoz. En su interior, además de en los aviones no tripulados se trabaja en otros proyectos aeronáuticos de gran trascendencia. «Esto es parte de un Ariane 5, un cohete de 70 metros de altura que sirve para poner en órbita los satélites y que aquí se utiliza para ensayos estáticos», comenta uno de los trabajadores del Instituto Nacional de Técnica Aerospacial. Un satélite de seis toneladas de peso requiere este cohete de mil toneladas para entrar en el espacio. Tras cumplir su cometido, el aparato se volatiliza en cuestión de segundos. Vanguardia de la estrategia Entre las piezas del Ariane 5 se vislumbra el montaje de sofisticados aparatos que responden a nuevos proyectos de investigación. Uno de ellos es el Programa Diana, que es un sistema de blanco aéreo versátil. Se utiliza como simulador de amenaza real para gran cantidad de armas actuales y futuras. Supone también una plataforma de I+D para tecnologías de aviones no tripulados de alta velocidad. El Proyecto Milano es otra de las líneas de innovación del Inta, el organismo público de investigación especializado en el desarrollo tecnológico aerospacial. Se trata de un avión de mil kilos de peso declarado de interés estratégico. Es un sistema de observación con autonomía para 20 horas de vuelo, un enorme avance teniendo en cuenta que el Siva no puede operar durante más de siete horas. Artilleros antiaéreos Alba es otro de los nombres con los que ha sido bautizado uno de los trabajos de los ingenieros y de todo el personal técnico de la industria de Defensa. Este sistema está orientado a instruir y entrenar a las unidades de artillería antiaérea de corto alcance (hasta cinco kilómetros). Sus principales componentes son el vehículo aéreo, el sistema de lanzamiento y la unidad de telecomando. Entre otras actividades, el Inta lleva a cabo una amplia gama de actividades de investigación y desarrollo en aviones, vehículos espaciales, sistemas de comunicación y navegación, observación de la Tierra, antenas para satélites, materiales avanzados, electrónica, energía, microgravedad y aerodinámica. Además, dispone de instalaciones donde se realizan ensayos y certificaciones para motores de avión, automóviles y materiales avanzados.