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«León necesita con urgencia un centro de emergencia para víctimas de malos tratos»

Herminia Suárez, en una foto de archivo

León

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La abogada Herminia Suárez Mata trabaja desde hace años con mujeres víctimas de violencia y no duda un momento sobre la primera medida que adoptaría si llegara a ocupar el sillón de alcaldesa. «León necesita con urgencia un centro de emergencia para víctimas de malos tratos», aclara. Además, dotaría al municipio con una casa para las mujeres, un espacio donde «pudiéramos estar sin temor a ser desalojadas, como nos ocurre ahora en Flora Tristán». La política no es su vocación, pero cree que desde las asociaciones -es secretaria de Adavas y milita en Flora Tristán desde los años 80- también se puede influir sobre la realidad cotidiana. -¿Con que eslogan se presentaría a las elecciones? -Las mujeres podemos. -La ley de igualdad no le permitiría llevar sólo a mujeres. -No, llevaría una lista paritaria en cremallera. Pero ya me gustaría llevar una lista sólo de mujeres para demostrar que podemos actuar y hacer las cosas bien desde todos los ámbitos. Sin embargo, estoy a favor de la democracia paritaria. -¿Pondría medallas? -No soy partidaria de esas medidas, pero si tengo que reconocer alguna alabor desde luego sería al movimiento feminista. Es el movimiento social más importante del siglo XX. En su lucha por erradicar la desigualdad y la discriminación no ha derramado una sola gota de sangre. -¿Y en León? -La asociación feminista Flora Tristán, que funciona de manera ininterrumpida desde 1975 y eso es muy difícil. -En la vida cotidiana, ¿qué ve necesario a su alrededor? -Los transportes públicos de calidad y alternativos, como la bici, pero con carriles bici. Ahora ser ciclista supone un gran riesgo. Sería beligerante con los ruidos, con el uso del coche y prohibiría el consumo de alcohol en la vía público. En lugar de connivencia con el botellón hay que adoptar medidas serias. -¿Qué hábitos políticos erradicaría? -La falta de coherencia. Limitaría la permanencia en el cargo a dos mandatos para acabar con esas inercias que se adueñan de las personas e implantaría la democracia participativa, lo que supondría también una ciudadanía más activa. -¿Y del lenguaje municipal? -Es hora de que las mujeres aparezcamos y no se nos ridiculice cuando intentamos hacer valer ese derecho. Como actitud personal siempre corrijo los papeles y pongo abogada y letrada. -¿Qué le parece un horario? -Los políticos han de dar ejemplo, también en la conciliación de la vida familiar. Dedican demasiadas horas a cosas inútiles.