Casi el 90% de las parroquias tampoco llega a 300 habitantes

Sobre un total de 774 parroquias 658 tienen menos de tres centenares de habitantes en la diócesis de León, algunas de las cuales, además, agrupan a varios pueblos en las geografías más dispares y dispersas. Para atenderlas sólo hay disponibles 271 curas en activo, casi ninguno jóven y que tienen que recorrer un mínimo de cuatro por cabeza en agitadas jornadas de misas dominicales, entierros y, las menos de las veces, bodas o bautizos cuando se tercie. Por encima de los diez mil habitantes sólo quedan ya dos parroquias, ambas en León capital, y otras 28 que superen los tres mil agrupando a pequeños y medianos grupos urbanos. La despoblación de los pueblos corre proporcionalmente a la del clero que tiene que atenderlos, lo mismo que su envejecimiento. Las nuevas promociones de curas han quedado reducidas a un pequeño goteo anual, apenas la décima parte de las que se registraban a mediados del pasado siglo cuando los seminarios, y no las residencias de curas en la tercera edad, estaban llenos a rebosar. Frente a 252 nuevos sacerdotes en los años cincuenta en la última década sólo fueron ordenados 23 y el ritmo tiende a decrecer aún más: el el seminario de León sólo hay siete alumnos.