Detenido en La Coruña un hombre de 74 años por matar a su mujer a martillazos

José A. R., de 74 años y vecino de la parroquia de Dorneda, en la localidad coruñesa de Oleiros, permanecía este sábado en dependencias de la Guardia Civil a la espera de prestar declaración judicial y pasará hoy a disposición judicial acusado de dar muerte a su mujer, Estrella Geremías, de 78 años. El cadáver de la mujer fue hallado enterrado a unos 30 metros de la vivienda familiar, en una parcela contigua y en una fosa poco profunda excavada allí. La investigación policial se inició el viernes, tras la denuncia por desaparición presentada por los hijos de la víctima, que llevaba dos días en paradero desconocido. Los agentes que descubrieron el cadáver manifestaron que presentaba signos evidentes de violencia por lo que requirieron la presencia de un médico forense. Según las primeras impresiones oculares, la mujer presentaba golpes en la cabeza que podrían haber sido producidos por un martillo y causado su muerte. Inmediatamente de presentada la denuncia por su desaparición, agentes de la Guardia Civil se entrevistaron con los familiares de la víctima y, horas después, localizaban el cadáver y procedían a la detención del marido, como presunto responsable de la muerte. Se da la circunstancia de que hace nueve meses que Estrella había solicitado la retirada de la orden de alejamiento que pesaba sobre José, como resultado de una denuncia por agresión presentada por ella. La mujer retiró la orden después de que su marido se lo pidiese por motivos de salud, ya que precisaba que le administrase medicación. Con esta muerte asciende ya a cinco el número de mujeres fallecidas en Galicia como consecuencia de la violencia doméstica en lo que va de año y 38 en toda España. La última víctima se produjo el pasado día 11 en la coruñesa localidad de Cee y también por golpes de martillo en la cabeza. Tras el suceso, el vicepresidente de la Xunta, Anxo Quintana, lamentó la tragedia, que consideró como «una demostración de un nuevo caso de tremenda injusticia en una sociedad enferma». Para Quintana, esta muerte pone de manifiesto «la complejidad del problema de la violencia contra las mujeres» y observó que «aún queda mucho por hacer» para erradicar ese tipo de tragedias.