El abogado de Belhadj duda de que influyera en El Chino o en El Tunecino
El abogado de Joussef BelhadJ, uno de los tres procesados que se sientan en el banquillo como presuntos autores intelectuales del 11-M y para el que se piden cerca de 40.000 años de cárcel, tachó de falto de rigor el considerar a su cliente como inductor de esos hechos. «Una persona no se levanta un día y es un líder. El liderazgo requiere un tiempo. Inductor -razonó el letrado al tribunal-es quien siembra la semilla del mal, según dijo el Fiscal. La jurisprudencia indica que no hay inducción si esta recae sobre una persona que tuviese ya preconcebida la idea. No es creíble que Belhadj inculcase nada ni a Jamal Ahmidan, El Chino ni a Serhane El Tunecino », que son los que la acusación considera como jefes operativos de la célula. Francisco Andújar se dedicó a desvirtuar la declaración de Mohamed Moussaten, sobrino de Belhadj, que estuvo en Bélgica con él en diciembre del 2003 y, cuando fue detenido, declaró que su tío le manifestó que pertenecía a Al Qaeda, le vio guardar dinero procedente de la mezquita y le enseñó páginas web de contenido yihadista . Según el letrado, esa declaración hay que cogerla «con papel de fumar» puesto que puede haber motivos espurios. Recordó que Mohamed Moussaten fue detenido junto a toda su familia y fue llevado a los calabozos junto a su padre y su madre. «¿Esto no es tortura?», se preguntó para concluir que después de cinco días de interrogatorios «lo lógico es que cediera a las presiones».