Los cultivos energéticos son la clave de los futuros regadíos
Si entonces se criticaba que el cierre del pantano serviría para hacer crecer productos excedentarios de la comunidad europea en la meseta leonesa, ahora el campo vislumbra su futuro en los cultivos bioenergéticos, la viticultura y horticultura y sus industrias derivadas de transformación. Los precios agrarios han subido un 50% este año como consecuencia de los cultivos energéticos, por lo que el campo genera más riqueza con menos gente que hace dos décadas. Entonces, uno de cada tres trabajadores leoneses estaban en el campo. Hoy no son más del 4,5% y se cree que la mano de obra agrícola bajará hasta el 3,5%, que es la población empleada directamente en la agricultura en los países más desarrollados de Europa.