Interior repatría a 409 inmigrantes que elevan a 8.000 los expulsados
El Ministerio del Interior ha repatriado en las últimas horas a 409 inmigrantes, con destino a Marruecos y Senegal, que habían entrado en España de manera ilegal, lo que eleva a casi 8.000 el número de expulsados en el 2007. Según informó ayer Interior en un comunicado, en estas repatriaciones se desplegó un dispositivo policial en el que participaron, en el caso de Senegal, 240 agentes de las Unidades de Intervención Policial y de la Comisaría General de Extranjería y Documentación de la Policía. Estos agentes permanecieron cerca de seis horas custodiando a los inmigrantes en los dos vuelos que se realizaron a Senegal, en los que también viajaron tres médicos y tres ATS. Según la nota, este año ya se han organizado 123 vuelos para repatriar a sus países de origen a 4.630 inmigrantes ilegales, a los que hay que sumar las devoluciones realizadas en vuelos comerciales, que en el primer semestre del año ascendieron a 3.066 inmigrantes, lo que hace un total de casi 8.000 expulsados. Masiva llegada Sobre las repatriaciones habló ayer en rueda de prensa el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, quien explicó que en agosto de 2006 hubo «una llegada de cayucos mucho más importante que este año». «En términos comparativos, estamos hablando de 700 frente a 8.000, y en términos anuales han llegado a España del orden de 8.500, y el año pasado a estas alturas llevábamos 24.000, es decir, que tenemos una presión menor y, además de los 8.500, una gran parte se repatrían», subrayó Rubalcaba. El titular de Interior también valoró el trabajo y esfuerzo de los policías que se encargan de custodiar a los inmigrantes ilegales que son expulsados desde España a sus países de origen en África. El ministro del Interio aseguró que las repatriaciones son «complejas», «complicadas» y se hacen en condiciones que «no siempre son fáciles», y afirmó que, desde la Administración, tratan de facilitar «esa difícil tarea» a los policías, por lo que, dijo, «entendemos las críticas sindicales», en alusión al comunicado que ayer emitió el Sindicato Unificado de Policía (SUP).