Diario de León

Seguridad Ciudadana encontró a la víctima ensangrentada en la cocina

Una mujer de 73 años muere apuñalada por su hija en Mieres Un anciano se entrega tras matar por celos a su mujer en Huelva Aumentan las denuncias por exceso de velocidad

La anciana vivía en su casa con su marido y la joven, que?padecía trastornos?psiquiátricos

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Cecilia Cuerdo Mateo Balín - efe | mieres sevilla madrid

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Una mujer de 73 años, Olga Inés L.G., de 73 años y vecina de Mieres, murió ayer apuñalada por su hija, R.P.A.L., de 45 años, que ha sido ingresada en prisión preventiva en la cárcel provincial de Villabona, informaron fuentes policiales. El aviso del suceso fue recibido por la Policía Nacional a las 10.00 horas de ayer, según las mismas fuentes, que precisaron que los hechos tuvieron lugar en el domicilio familiar, situado en la calle de La Vega, número 38, en el centro de Mieres. Hasta la vivienda se trasladó una dotación de la Policía Nacional de la Comisaría Mieres, destinada en la Unidad de Seguridad Ciudadana, donde encontraron, tendida en el suelo de la cocina, a una mujer ensangrentada. En el domicilio se encontraban también el marido de la víctima y su hija, R.P.A.L., que, al parecer, sufre problemas psiquiátricos. La hija, que convivía con sus padres, tenía la ropa manchada de sangre y aseguró a la policía haber asestado varias puñaladas a su madre, según las mismas fuentes. La madre fue trasladada aún con vida hasta el Hospital Álvarez Buylla de Mieres, donde falleció a las 15.00 horas. La víctima, natural de San Román de Candamo, vivía en la misma casa que su hija, sin que constase ninguna denuncia anterior entre ninguna de ellas. La presunta agresora, tras prestar declaración en la comisaría, fue puesta a disposición judicial. Un ataque de celos parece ser la causa del trágico suceso registrado esta tarde en Beas (Huelva). Un anciano de 66 años se ha entregado a la Guardia Civil tras presuntamente asesinar a su compañera sentimental a martillazos. Se trata de la sexta víctima de violencia doméstica contabilizada en Andalucía en lo que va de año, y la número 52 en toda España. Fuentes de la Guardia Civil explicaron que el suceso se produjo a primera hora de la tarde del jueves en la barriada Constitución del municipio onubense, de poco más de 4.000 habitantes, en el domicilio de la fallecida. Algunos vecinos explicaron que el anciano, José B. F., era viudo y desde hacía tiempo -unos tres años mantenía una relación con la víctima, F.P.G. El agresor es una persona muy conocida en el pueblo por su familia, dado que su hermano es el sepulturero de la localidad. Al parecer, y movido por los celos, presuntamente asestó hasta 18 martillazos a la mujer, de 59 años, en diversas partes del cuerpo, y posteriormente, arrepentido por lo sucedido, llamó al cuartel de la Guardia Civil para confesar los hechos y entregarse de forma voluntaria. No constan antecedentes de malos tratos ni denuncias presentadas por la mujer. Una de las causas que explican la sangría en las carreteras durante este mes no es otra que la velocidad. El exceso de los límites legales está detrás de buena parte de los accidentes que han sucedido en agosto en las carreteras convencionales. Buena muestra de ello es la cifra conocida este jueves con la última campaña de velocidad, realizada por la Agrupación de la Guardia Civil entre el 6 y el 19 de agosto. En este periodo más de la mitad de los 34.088 vehículos amonestados fueron cazados en vías secundarias, donde la circulación se incrementa con creces en la temporada vacacional. El último operativo especial tuvo lugar del 13 al 26 de marzo, unos días antes del comienzo de la Semana Santa. En aquella ocasión los agentes de tráfico denunciaron a 40.587 vehículos en los más de 1,64 millones de controles realizados, un 2,46% del total. Mientras que en esta campaña la cifra de vehículos denunciados se redujo (34.088) pero con muchos menos registros: 1,31 millones, lo que en términos absolutos supuso el 2,56%. Este porcentaje también es superior al de la campaña de agosto de 2006, cuando fueron cazados 32.153 automóviles en 1,32 millones de controles, el 2,41%. Esta vez los agentes de la Guardia Civil establecieron servicios de vigilancia en unos 2.000 tramos de carreteras con los 250 radares de los que dispone, excepto en las comunidades del País Vasco y Cataluña que tienen trasferidas las competencias en esta materia. La DGT recordó que la velocidad aparece como factor concurrente en uno de cada cuatro accidentes mortales.

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