El Presupuesto dedica al gasto social un porcentaje menor que en el 2007

Las últimas medidas de carácter social presentadas por el Gobierno han generado una dura polémica. La oposición considera que esas iniciativas son electoralistas y provocarán un aumento desmesurado del déficit difícil de asumir. En resumen, la tesis del PP es que el Gobierno está elevando enormemente el gasto social para «comprar votos con el dinero de todos los españoles». Por el contrario, el Ejecutivo niega que se trate de medidas electoralistas y afirma que son necesarias, aunque presume de haber elevado considerablemente el gasto social sobre al año anterior. Pero a luz de las frías cifras consignadas en los Presupuestos Generales del Estado para el 2008 recién presentados, ni uno ni otro tienen razón. De hecho, a pesar de las nuevas ayudas para el alquiler, del cheque bebé de 2.500 euros y de otras iniciativas, el porcentaje que las cuentas del Estado dedican al gasto social en el 2008 es incluso menor que en el 2007. Una décima menos Según los datos aportados por el Ejecutivo en el cuadro de políticas de gasto, en el 2007 el gasto social absorbió el 50,6% del Presupuesto, con un total de 147.360,74 millones de euros. Pues bien, ese mismo cuadro indica que en el 2008 el porcentaje del Presupuesto dedicado al gasto social ocupará el 50,5%, llegando a los 158.836,31 millones. Una décima menos. Es decir, pese a la batería de medidas sociales presentadas en los últimos días, el porcentaje del gasto total en protección social no solo no aumenta sino que disminuye en una irrelevante décima. De hecho, el aumento de la dotación destinada a los gastos sociales en términos absolutos es del 7,8%, pasando de 147.360,74 millones de euros a 150.836,31 millones. Ese incremento es también menor que el que experimenta el total de gastos consolidados del Estado, que se sitúa en el 8%, pasando de 291.191,19 millones de euros en el 2007 a los 314.521,55 millones de euros en el 2008. El dinero dedicado al gasto social crece por tanto dos décimas menos de lo que crece el gasto medio en todos los capítulos. Dentro del apartado social, uno de los apartados que crece también menos de lo que aumenta el gasto total (8%) son las pensiones, que suben un 7,2%, pasando de 91.458,18 millones de euros en el 2007 a 98.011,78 millones en el 2008. Menos aún crece el presupuesto dedicado al fomento del empleo, que pasa de 7.286,95 millones de euros en el ejercicio anterior a 7.653,83 millones en el 2008, un incremento de sólo un 5%, tres puntos menos que el aumento del gasto consolidado total. El capítulo más perjudicado en esta partida es el de Cultura, cuyo aumento es de solo el 4,2%, casi la mitad de lo que crece el conjunto de gastos del Estado. Por el contrario, las partidas que crecen por encima de la media son los servicios sociales y de promoción social, que se elevan un 24,8% gracias a la Ley de Dependencia; el dinero dedicado al desempleo, que se incrementa un 9%; la política de acceso a la vivienda, con un 9,7% de subida, y el presupuesto para Educación, que aumenta considerablemente hasta llegar al 13,9%, seis puntos por encima de la media. Solbes lo reconoce Esta situación aparentemente contradictoria ha generado no solo un enfrentamiento entre el Gobierno y la oposición, sino también una nueva diferencia de valoraciones entre el ministro de Economía, Pedro Solbes y otros miembros del gabinete. Mientras el titular de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, así como la vicepresidenta María Teresa Fernández de la Vega han defendido el supuesto aumento del gasto social como algo necesario, Solbes acaba de asegurar que no hay tal. En la rueda de prensa de la presentación de los Presupuestos el vicepresidente segundo dijo que «no aparece el despilfarro terrible del gasto social» que anunciaba el PP y afirmó que aunque crece en términos absolutos, el gasto social es el mismo que el año pasado en términos porcentuales.