El Estado dispone de elementos para frenar un referéndum ilegal

El Estado dispone de instrumentos suficientes para que impedir la celebración de un referéndum ilegal. Todos los juristas, tanto progresistas como conservadores, que desde el pasado viernes estudian el anuncio del lendakari Juan José Ibarretxe de que convocará dos consultas populares coinciden en que tal iniciativa es ilegal y hay mecanismos legales y vías judiciales bastantes para frenar tal actuación. No hay una sola voz discordante. Vocales del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), magistrados de todas las tendencias y expertos constitucionalistas aseguran que tanto la Constitución, en sus artículos 92 y 149.1, como la ley orgánica que regula las distintas modalidades de referendo, como la jurisprudencia del Tribunal Supremo, «dejan claro» que es el Estado quien tiene «en exclusiva» la competencia para convocar o autorizar consultas populares, sean vinculantes o consultivas. En otras palabras, ningún presidente de comunidad autónoma puede convocar un referéndum si no es por «delegación expresa» del Ejecutivo o de las Cortes Generales. «Si lo hace, será un ilegalidad, sin duda», resume Luis Aguiar, catedrático de Derecho Constitucional y vocal progresista del CGPJ. Los mecanismos legales que el Estado puede poner en marcha si Ibarretxe trata de convocar una consulta popular en el otoño de 2008, tal como ha prometido, son múltiples y dependerán del acto o instrumento concreto que el lendakari o el Parlamento vasco elijan para realizar la convocatoria, elemento que aún no han desvelado. E l Tribunal Superior de Justicia del País Vasco o el TC disponen de habilitación legal para suspender de forma cautelar la convocatoria y declarar su nulidad una vez resuelvan sobre el fondo del asunto. Si se trata de un acto de tipo administrativo o de una resolución o disposición no legal que vulnera la Constitución, el Estado podrá optar entre recurrir la medida ante la Sala de lo Contencioso Administrativo del tribunal superior vasco o presentar una impugnación o un conflicto de competencias ante el TC. Si la convocatoria se realiza mediante una ley u otro instrumento con valor legal, la demanda se presentaría siempre ante el Constitucional bien mediante recurso o conflicto de competencias. Zapatero duda El presidente del Gobierno, Rodríguez Zapatero, no cree a Juan José Ibarretxe. Está convencido de que el lendakari va de farol y que nunca llegará a convocar el referéndum anunciado el pasado viernes en el Parlamento de Vitoria. Los socialistas sostienen, y así lo expusieron en la reunión de este lunes de la Ejecutiva federal del partido, que Ibarretxe sólo busca calentar el clima político y alentar el victimismo de los más radicales de la sociedad con la esperanza de obtener réditos electorales. Zapatero propuso su receta: «serenidad y firmeza». No habrá medidas excepcionales y tampoco, en palabras del secretario de Organización del partido, José Blanco, «aspavientos demagógicos». La dirección del PSOE asegura que fue precisamente la respuesta «exagerada» de Aznar al plan Ibarretxe, y su actitud frente a los nacionalismos, lo que hizo que partidos con un marcado perfil soberanista crecieran electoralmente en las últimas generales. Recuerdan, el PNV perdió 140.000 votos y cuatro escaños en unos comicios justo después de que los socialistas accedieran a debatirla y rechazarla.