«De trabajar muchísimas horas para otros, trabajo mucho para mí»

Yuca, enchilada de camarones, parrillada, emperador y ensaladas tropicales son los platos cubanos más solicitados en El Compay, un restaurante cubano abierto el 11 de octubre en el corazón de San Mamés. Tras varios trabajos como cocinera en bares leoneses, la que antaño fuera profesora de natación y directora de escuela probó su suerte como empresaria. Pensó que «de trabajar muchísimas para los demás, trabajaría muchas horas para mí», apostilla esta mujer que llegó a León siguiendo la senda contraria a una rama de sus abuelos. Ella puso la idea, el empuje y la firma en el banco y el Ildefe le realizó el plan de empresa «sin ningún coste», precisa. «Estoy muy agradecida al Ildefe y puedo presumir de que además son clientes míos», apostilla. Antes de venir a España se estrenó como cocinera profesional en el «paladar» -restaurantes caseros abiertos en Cuba durante el período especial- de las playas del Este, trabajo que compaginaba con el de la escuela. Tenía cuatro mesas y doce sillas. Cuando llegó a España ya venía con la idea de abrirse paso con un negocio propio pero tuvo que esperar seis años. «Tuve que esperar el momento, a que llegara la niña -su hija Yein-Lee Nieves- y aprendiera a trabajar como camarera», aclara. Antes que la joven, que es la cara del restaurante tras la barra y en las mesas, llegó su hermano, otro emprendedor, y el tercer puntal de la familia. «Él, que tiene un negocio de construcción, me ha ayudado muchísimo», señala Marisa. Así que, concluye, «el negocio está a mi nombre, pero es de los tres: no tomo decisiones solas. Desde pequeños les enseñé a estar muy unidos a mí», confiesa con orgullo. Se declara encantada con el negocio, aunque es consciente de que hasta que no pasen tres años no verá los verdaderos resultados de la inversión. «Es difícil y más en un barrio, donde no recibes el flujo de turistas que tiene el Húmedo». Pero no se le arruga la cara y espera que llegue el frío - «aunque es lo que menos me gusta de León»- para animar el local, que ofrece dos sesiones semanales de música cubana en directo a cargo del dúo Tradición.