La provincia leonesa perderá más de cinco habitantes al día en los próximos 20 años

Una media de cinco leoneses abandonan diariamente la provincia, en los próximos 20 años, un éxodo continuo que, según una proyección realizada por el Instituto de Política Familiar de Castilla y León, llevará a más de 38.000 leoneses al exterior de las fronteras de la provincia. Una población similar a la suma de los habitantes de La Bañeza y Astorga. Tal y como asegura el IPF-CyL, de las 21 personas que abandonan diariamente la comunidad, León ocupa el primer puesto en perdida poblacional con una media de 5,26 habitantes día, seguido de Salamanca que pierde 3,44 habitantes por día. El estudio además sostiene que León proyectaría en veinte años una población próxima a los 461.000 habitantes, casi cuarenta mil menos de los que cuenta en la actualidad el censo provincial. En lo que se refiere a población activa, la provincia perdería un 5,65% de población con edad de desarrollo laboral, lo que significaría un descenso de más de 27.500 trabajadores en los próximos 20 años. La actual despoblación y envejecimiento de la comunidad se sitúa en 10 años por encima del resto del país, lo que quiere decir que mientras que en España la banda de edad más gruesa se sitúa entre los 25 y los 29 años, en Castilla y León está entre los 35 y los 39. Además, en el último estudio sobre demografía, elaborado por la Dirección General Estadística, León acumuló el mayor número de movimientos en lo que respecta a emigración hacia otras autonomías, casi 7.200 movimientos. Un dato que refleja más de 2.000 movimientos sobre la siguiente provincia que más flujo migratorio soportó, Burgos. El análisis poblacional, que expone como eje principal de solución a fin de evitar la despoblación a la mujer, formula propuestas de solución en la línea de las desarrolladas por los técnicos del Equal y que son soluciones que pasan por el desarrollo de núcleos laborales que permitan asentamientos y por la repoblación de territorios que se enfrentan a este fenómeno.