El PP recusará hoy a tres magistrados progresistas del Constitucional

La guerra entre el PSOE y el PP por controlar el Tribunal Constitucional sigue subiendo de tono hasta el punto de poner en peligro su funcionamiento. El secretario ejecutivo de Libertades Públicas y Justicia del PP, Ignacio Astarloa, anunció ayer por la tarde lo que Eduardo Zaplana confirmó por la mañana, que su partido ha decidido recusar a tres magistrados del sector progresista para apartarlos del recurso del PP contra la reforma que contempla prorrogar el mandato de su presidenta, María Emilia Casas. Astarloa dijo que el PP presentará hoy mismo la recusación. Este movimiento es una respuesta a la decisión sin precedentes del Gobierno de recusar a los magistrados conservadores Roberto García-Calvo y Jorge Rodríguez Zapata, que el portavoz popular en el Congreso calificó de «inaudita e insólita». Zaplana argumentó que «los motivos que se imputan a unos tienen que servir para todos». «Lo que pierde en el Parlamento, lo quiere ganar en el Constitucional convirtiéndolo en una tercera cámara», le contestó Diego López Garrido. El portavoz socialista consideró «muy llamativo» que los populares consideraran una medida política la recusación planteada por el Ejecutivo y ahora hagan lo mismo. El Tribunal Constitucional está compuesto por 12 magistrados, seis progresistas y seis conservadores, pero la presidenta, que pertenece al primer sector, puede inclinar la balanza con su voto de calidad. Sin embargo, tanto Casas como el vicepresident Guillermo Jiménez (conservador) se han abstenido en el recurso del PP contra la reforma que prevé que continúen en sus puestos. Esto hace que para esa cuestión clave haya un empate a 5, pero el voto de calidad correspondería en este caso al conservador Vicente Conde, que asumiría la presidencia en sustitución de Casas Recursos En el supuesto de que prosperaran las dos recusaciones del Gobierno, los progresistas tendrían una mayoría de 5 a 3 en el tribunal. Pero si fueran aceptadas las tres presentadas por el PP supondría su bloqueo total por falta de quórum, ya que solo quedarían cinco magistrados, menos de la mitad obligatoria para tomar decisiones. Zaplana no precisó los nombres de los magistrados que van a ser recusados, aunque serán Pablo Pérez Tremps, Manuel Aragón y Pascual Sala, que se habrían mostrado partidarios de la reforma para ampliar el mandato de Casas en una reunión convocada por ésta el pasado 12 de junio. La clave de la lucha sin cuartel por el control del tribunal reside en que éste tiene que decidir sobre varios recursos del PP contra algunas de las leyes más importantes del Gobierno de Zapatero, como el Estatuto de Cataluña, los matrimonios homosexuales o la Ley de Igualdad. El magistrado del sector progresista Pérez Tremps ya está recusado en el recurso popular contra el Estatut, aunque no en los demás que se han presentado. Sólo la renovación de este órgano -cuatro de sus magistrados cumplen mandato el próximo 31 de diciembre- salvaría el bloqueo y permitiría superar la crisis. Pero, de nuevo, el acuerdo de los dos grandes partidos es imprescindible para elegir a los miembros de un Constitucional renovado.