La logística vuelve a mandar
Según el director de Fegulem, Antonio Alonso, el futuro de los polígonos industriales está en aprovechar la privilegiada situación de León en el mapa como cruce de caminos entre Madrid, Galicia y Asturias, con terminales secundarias de autovías que puedan complementarlo desde Valladolid o la Ruta de la Plata hacia el Sur. Se supone que son también estos los motivos por los que las administraciones públicas alientan este tipo de superficies, además del lógico interés de los ayuntamientos para frenar la desertización de comarcas enteras tras las reconversiones de la agricultura y de la minería. De hecho, los precios del suelo industrial son irrisorios comparados con el metro cuadrado de la vivienda más pobre y su financiación corre a cargo de municipios, la Junta o el Estado, que lo subvencionan gustosamente a cambio de puestos de trabajo.