La rápida intervención de la Policía permitió identificar al presunto autor de las cuchilladas
Muere un joven de 16 años en una reyerta de neonazis y antifascistas
La trifulca, que provocó otros ocho heridos, arrancó en el metro de Madrid y siguió en la calle Ocho per
Un joven resultó muerto y otros ocho heridos en una reyerta entre neonazis y antifascistas ocurrida este domingo en una estación del metro de Madrid. La rápida intervención de la policía permitió identificar al presunto autor de las cuchilladas mortales, quien pudo ser detenido, según informó el consejero de Justicia de la Comunidad de Madrid, Alfredo Prada. La reyerta comenzó sobre las 12:00 horas en un vagón del metropolitano en la estación de Legazpi. Fuentes de la Jefatura Superior de Policía explicaron que en la misma estuvo implicado un grupo de ultras que se dirigían a una manifestación de las Juventudes Democracia Nacional, convocada con el lema «Contra el racismo anti español, contra la inmigración», y otro que de antifascistas que al parecer pretendían reventar dicho acto. La trifulca, en la que resultaron contusionados pasajeros ajenos a las bandas, se extendió a la estación, y continuó en la calle, ya en el paseo de las Delicias y la plaza de Legazpi. Los efectivos de policía que acudieron al lugar fueron recibidos a pedradas por los alborotadores antes de ser dispersados. El fallecido, de 16 años y miembro del grupo de antifascistas, recibió una puñalada en el corazón. Los médicos del Samur trataron de reanimarle durante media hora. Un joven que acompañaba al fallecido, también de unos 20 años, resultó gravemente herido al recibir otra cuchillada en el tórax, por lo que fue evacuado hasta el hospital Doce de Octubre, donde fue intervenido quirúrgicamente. Asimismo, otras tres personas resultaron heridas de arma blanca, por lo que fueron atendidas en el hospital de campaña levantado en el lugar de los hechos por los servicios de urgencia antes de ser trasladados hasta la clínica de la Concepción. El Samur también atendió a un viajero que sufrió una caída, a un policía que recibió el impacto de una botella y a un guardia jurado del metro que tenía una crisis de ansiedad y contusiones. Los tres fueron evacuados al citado centro sanitario. Los médicos tuvieron que aplicar colirios a una decena de viajeros del metro que presentaban escozor en los ojos, posiblemente debido al uso de aerosoles de autodefensa por parte de los jóvenes que participaron en la reyerta. Incidentes en la concentración Varios cientos de personas asistieron a últimas horas de la tarde del domingo a una concentración de protesta en la Puerta del Sol. Se escucharon consignas como «los fascistas son los terroristas» y «televisión manipulación». Un grupo de asistentes la emprendió contra los reporteros gráficos, a los que se impidió a empujones realizar su trabajo. Sobre las 20:00 horas, un centenar de encapuchados al grito «han matado a uno de los nuestros» avanzó desde las inmediaciones de la Gran Vía hacia el barrio de Malasaña. A su paso por las estrechas calles de la zona volcaron contenedores, a los que prendieron fuego, tiraron motocicletas y destrozaron mobiliario urbano. Efectivos de la Unidad de Intervención de la Policía Nacional, pertrechados con material antidisturbios, dispersaron a los encapuchados.