Los últimos del Valle de los Caídos
Cientos de nostálgicos del dictador se reunieron en el mausoleo que no volverá a acoger manifestaciones franquistas tras la reciente aprobación de la Ley de Memoria Histórica
Cientos de nostálgicos del franquismo se congregaron este fin de semana, probablemente por última vez, en el Valle de los Caídos, donde está enterrado el dictador Francisco Franco, de cuya muerte se cumplen mañana 32 años. Estos actos serán prohibidos en cumplimiento de la Ley de Memoria Histórica, promovida por el Gobierno socialista y aprobada a finales de octubre por el Congreso para rehabilitar a las víctimas de la Guerra Civil y del franquismo. La ley estipula la despolitización del Valle de los Caídos, el mausoleo situado a unos 60 kilómetros de Madrid, y la prohibición de las manifestaciones en memoria de Franco y de su mentor ideológico, José Antonio Primo de Rivera, fundador de la Falange y fallecido también un 20 de noviembre, pero de 1936. Medio millar de personas se concentraron ayer en la Plaza de Oriente de Madrid para recordar y rendir homenaje a ambos, en un acto en el que expresaron además su «indignación y repulsa» por la Ley de Memoria Histórica. Convocados por la Confederación Nacional de Combatientes, los asistentes gritaron a favor de Franco y Primo de Rivera, en contra del Rey y del presidente del Gobierno, y corearon en varias ocasiones «Carrillo, asesino». Durante la concentración ondearon decenas de banderas preconstitucionales y numerosas personas vestían camisas azules, y portaban brazaletes con los colores de la bandera y boinas rojas. El acto transcurrió sin incidentes y durante el mismo intervinieron, entre otros, el fundador de Fuerza Nueva, Blas Piñar, su nieto Miguel Menéndez Piñar y el falangista Emilio Mariat, quienes denunciaron que se pretendan ilegalizar estos actos y a las formaciones políticas que los apoyan. Piñar confió en que este no sea el último año en que las autoridades «del régimen» permiten la celebración de un acto de fidelidad «a un hombre, caudillo victorioso de una cruzada contra el comunismo», y mantuvo que Franco sacó a España de la miseria. Lamentó que en la actualidad se pueda «blasfemar, legislar contra natura, quemar banderas y pedir la fragmentación de España». Su nieto se refirió a la Guerra Civil como una «guerra de liberación». Antifascistas Los Mossos d¿Esquadra informaron ayer que el saldo final de agentes de este cuerpo policial autonómico heridos en la manifestación antifascista que se celebró el sábado por la noche en Barcelona es de 22. Los Mossos confirmaron que siete jóvenes manifestantes fueron detenidos durante los violentos incidentes ocurridos en el transcurso de la marcha, que se celebró en el centro de la capital catalana en protesta por la muerte de Carlos Javier Palomino Muñoz, un chico de 16 años que falleció en el Metro Madrid tras recibir una puñalada de un militar profesional de ideología nazi, que, al parecer, se dirigía a una manifestación contra la inmigración organizada por el grupo ultraderechista Democracia Nacional. La mayoría de los 22 agentes autonómicos heridos sufrieron brechas y contusiones en diversas partes del cuerpo, y solo uno tuvo que ser hospitalizado tras quedar inconsciente por el impacto de un objeto contundente lanzado por parte de los manifestantes. Los siete jóvenes detenidos, cuyas identidades no fueron facilitadas por la Policía, permanecían el domingo por la tarde en comisaría, a la espera de que concluyan los interrogatorios, antes de pasar disposición judicial.