Diario de León

La competencia entre bancos y cajas deja más de un 40% de hipotecas de alto riesgo

Publicado por
A. Núñez - león
León

Creado:

Actualizado:

La guerra por colocar hipotecas a toda costa cuando los costes de interés eran bajos y apenas rozaban la inflación ha dejado una estela de impagados que ahora se hace notar, cuando el IPC está por encima del 4,1%, al que hay que añadir las comisiones y beneficios de las entidades bancarias, que, por término medio, es otro punto más. Recapacitando sobre el tema, éstas dividen en tres los riesgos de sus clientes, a los que antes adelantaban con optimismo sumas multimillonarias para comprar lo que fuera. Sin llegar al extremo de las hipotecas basura americanas, cuya cotización está creando una crisis bursátil a nivel mundial, en España también la morosidad se está empezando a dividir por tres, aunque todas suman en la cuenta final de resultados de las entidades financieras. Según los expertos las hay de varias clases. Las normales a quince o veinte años con el 80% del valor hipotecado, contando con que su coste mensual no sume más de la tercera parte de los ingresos del comprador no tienen problemas de morosidad. Luego están las «raras», a cuarenta o cincuenta años, ciento por ciento del crédito sobre el valor de venta del piso, a menudo inflado, que se parecen bastante a las hipotecas basura de Estados Unidos, con una morosidad que se ha multiplicado por cuatro para los bancos y que casi todas tienen origen en el boom inmobiliario de los últimos cinco años, sumando aproximadamente otro 30%. Por último, el 10% restante corre a cargo de inmigrantes sin apenas arraigo, pero a los que se concedieron también créditos a cambio de una nómina que en cuelquier momento puede volatilizarse. Estas son aún más recientes, datan de apenas año y medio o dos años atrás y son las mas problemáticas: tienen el record del 4% de impagos. Competencia En el sector no se sabe cómo ha podido llegarse a la actual situación de impagos y se toca madera respecto al futuro, dándose como única explicación que la competencia entre entidades financieras era dura y cada cual afinaba los riesgos como podía. Ahora no le sirve de consuelo a nadie. Respecto a un futuro más o menos inmediato, nadie es optimista. Con los precios del petróleo rondando los cien dólares el barril y los de los cereales disparados para artículos de alimentación los analistas esperan nuevos repuntes del euribor, que podrían empeorar si, encima, baja el euro. En la morosidad los bancos se mantienen en una espera prudencial de 18 meses. O sea, después de las elecciones.

tracking