Los inmigrantes más castigados se acogen al «arraigo social» como último recurso
No son muchos, pero su situación es especialmente dura porque son los que están en la última división de la escala, los que se han pasado años en España sin documentación, viviendo de lo que han podido y, en ocasiones, sometidos a los abusos laborales de empresarios nacionales o extranjeros. No entraron en ningún proceso extraordinario de normalización y ahora se les ofrece una vía excepcional contemplada en la ley de extranjería, el arraigo social. Según los datos que maneja la Subdelegación del Gobierno en León, en el 2007 121 inmigrantes sin papeles intentaron regularizar su situación acogiéndose a una autorización de residencia temporal por razones de este tipo, un 50% más que el año anterior, cuando se tramitaron 82 solicitudes. El arraigo social es una media que propicia la concesión de documentos a los inmigrantes que acrediten tres años de estancia continuada en España, que tengan un contrato de trabajo cuya duración no sea inferior a un año y que tengan antecedentes penales en los últimos cinco años en cualquiera de los países donde haya vivido. A pesar de las numerosas peticiones, el año pasado sólo consiguieron este estatus 49 extranjeros. Muchos de ellos no pudieron beneficiarse de la regularización masiva del año 2005 porque acababan de llegar a España, pero los tres años que han pasado desde entonces les da ahora una nueva oportunidad a través del arraigo social. Además, una gran parte de los solicitantes de arraigo ya tuvieron permiso de residencia y trabajo, aunque no lo conservan por diferentes motivos. El 40% no se aceptan Pero no siempre lo tienen fácil. Los criterios exigidos por la ley son muy concretos, por lo que es habitual que las solicitudes no prosperen. Al menos cuatro de cada diez. Una veintena de los 121 solicitantes no pudieron acreditar su residencia en España durante tres años seguidos. Según la misma fuente, nueve casos fueron archivados porque no había causas para continuar con el expediente y otros 17 fueron inadmitidos porque su titular tenía antecedentes penales o pesaba sobre él una orden de expulsión. Circunstancia excepcional El arraigo social es una de las circunstancias excepcionales utilizadas en León para la concesión de papeles. Entre la documentación para acreditar todo lo que exige la Administración se encuentra el denominado informe de arraigo, que en el caso de León es realizado por el Centro Municipal de Atención a Inmigrantes, dependiente de la Concejalía de Bienestar Social. En este departamento se han solicitado 61 informes, la mitad de las solicitudes tramitadas ante la Subdelegación, lo que significa que la mitad de los sin papeles se encuentran residiendo en la capital leonesa. «Los criterios para seleccionar a los solicitantes de la reagrupación familiar rozan la arbitrariedad para impedir la entrada de extranjeros» MIGUEL ÁNGEL CUETO, responsable del centro guía para inmigrantes de UGT