Todos los grupos políticos excepto ANV se concentraron en Bergara para condenar el atentado
La izquierda radical responde con la «kale borroka» a la suspensión judicial
La violencia callejera alcanzó a un edil socialista, una sede del PNV, bancos y una estación de Renfe
La izquierda radical vasca respondió con violencia a las decisiones judiciales que han dejado fuera de la contienda electoral a ANV y EHAK por ser «instrumentos» de la ilegalizada Batasuna. Durante toda la noche del viernes se sucedieron los actos de kale borroka que alcanzaron a un edil socialista, una estación de tren, una sede del PNV y entidades bancarias. Entre tanto, representantes de todos los grupos políticos, excepto ANV que detenta la alcaldía, se concentraron en Bergara para condenar el atentado contra el juzgado de paz de la localidad guipuzcoana. El primero de los ataques tuvo lugar cinco minutos después de la medianoche en el apeadero de la estación de Renfe en la localidad vizcaína de Basauri. Tras romper los cristales de la taquilla, varios individuos rociaron con líquido inflamable el interior y le prendieron fuego. Las llamas fueron sofocadas en primera instancia con extintores por miembros de la ertzaintza y, posteriormente, por una dotación de parque de bomberos. El atentado causó daños de consideración en el mobiliario de la estación, en la taquilla, paredes y techos. Cinco minutos después, a las 0.10 horas, y en una acción rápida y coordinada, varios encapuchados arrojaron cócteles molotov contra los cajeros de Bbva, Santander, Banco Guipuzcoano e Iparkutxa en el barrio bilbaíno de Santutxu. Los bomberos tuvieron que intervenir para sofocar las llamas que afectaron, sobre todo, a los cajeros automóaticos. A las dos y cuarto de la madrugada, el ataque se dirigió contra una sucursal del Bbva en Vitoria contra la que arrojaron un artefacto mixto compuesto por líquido inflamable y material piroténico. La magnitud de las llamas obligó a la ertzaintza y a los bomberos a desalojar dos viviendas situadas sobre la sucursal. También de madrugada fueron atacadas la casa del Pueblo del PSE y el batzoki o sede social del PNV en Elorrio. En este último lugar, los asaltantes rompieron los cristales y la puerta y efectuaron pintadas con pintura roja y amarilla en el interior en las que se podía leer «PNV español» junto a dianas. El ataque más grave tuvo lugar en Irún donde a la dos de la mañana, varias personas sin identificar arrojaron media docena de artefactos de fabricación casera contra la vivienda particular de Félix Asensio, concejal de la localidad guipuzcoana de Irún y apoderado de las Juntas Genrales de Guipúzcoa. En el momento del ataque, el edil se encontraba en el interior de la vivienda junto a su familia. Por fortuna, los artefactos impactaron en la fachada de la vivienda, el jardín y un árbol.