«Seguiría haciendo políticas sociales»

Paulino Bejega, pensionista de 64 años, si fuera el presidente del Gobierno, «seguiría, en cierta manera, impulsando políticas sociales de cara a solucionar el problema de los dos millones de españoles que aún viven por debajo del umbral de la pobreza» y, además, según cuenta, «pagaría, de una vez por todas, la deuda histórica a esas mujeres que han tenido cotizaciones durante 1960 y 1967 sin llegar a los mil ochocientos días por culpa de la dictadura». Bejega, que trabajó en la mina, considera que si las pensiones mínimas suben, también deben hacerlo las medias «para que los pensionistas participen en la riqueza del país» y se adapten las prestaciones a las subidas del IPC. «En León hay que paliar toda la destrucción que han sufrido los trabajadores de la minería o la agricultura; es necesario buscar soluciones y encontrar alternativas para hacer viable a esta provincia». Bejega también se acuerda de las reivindicaciones de ciertos colectivos para constituir a la provincia como una comunidad autónoma, sin Castilla. «León sólo... Ahora sería imposible porque necesitaría una ratio de 2,2 trabajadores por cada pensionista y aquí estamos en 1,8». Para Bejega son fundamentales las iniciativas encaminadas a fijar capital en León y por eso asegura que, si pudiera, facilitaría a las empresas la labor si decidieran instalarse en la provincia, «pero tienen que ser negocios suplementarios al de la ganadería, agricultura o a la fábrica de Antiobióticos». Y dice que tendría en cuenta a los jóvenes, «porque es muy preocupante que se tengan que ir fuera en busca de un trabajo cuándo están tan bien preparados». Su percepción sobre los políticos de ahora es la de mucha gente. «Los de León pierden un poco la cabeza cuando llegan a Madrid o Valladolid y se les olvida que se les eligió para defender los intereses de su tierra».