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En la colisión se vieron implicados setenta vehículos y la A-5 permaneció cortada dos horas

Un accidente en cadena por la niebla deja 35 heridos a la entrada de Madrid

Un primer choque múltiple pudo ser el origen de varios más, según la Policía Local de Navalcarnero

Algunos de los vehículos que se vieron implicados en la colisión de ayer en la A-5

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Mateo Balín - madrid
León

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La niebla volvió a ser protagonista en un accidente múltiple en el que se vieron implicados unos setenta vehículos a la entrada de Madrid. Al menos 35 personas resultaron heridas con magulladuras y contusiones leves como consecuencia de la colisión en cadena. Sólo un pasajero de 60 años ingresó en el Hospital de Móstoles con un traumatismo craneoencefálico moderado. En el siniestro se vieron afectados seis camiones, lo que obstaculizó en exceso el trabajo de los operarios para limpiar la vía, que no se abrió a la circulación hasta dos horas y media después. El accidente ocurrió hacia las 10.15 horas en un tramo recto de la carretera de Badajoz (A-5), a la altura de Navalcarnero con dirección a Madrid, en el kilómetro 31. En ese momento un denso banco de niebla dificultaba la visibilidad, según la Guardia Civil de Tráfico. La colisión se produjo en tres secuencias. Según la Policía Municipal de Navalcarnero, en cuyo término se registró el accidente, en realidad se trató de un primer choque múltiple al que le han seguido varios más, algunos con varios vehículos implicados y otros tan sólo con pequeños alcances, entre ellos seis camiones de gran tonelaje. Empotrados De hecho, se contabilizaron unos 70 vehículos con daños materiales, algunos empotrados unos en otros, entre los puntos kilométricos 31 al 37, en los que no se ha podido restablecer la circulación hasta las 12.50 horas. Entre los 34 heridos, sólo uno reviste carácter grave y 24 fueron trasladados a distintos centros sanitarios, entre ellos los hospitales de Móstoles, Leganés y Getafe, y nueve recibieron el alta en el lugar de los hechos, a donde acudieron varias dotaciones de ambulancias y cuatro de bomberos de la Comunidad de Madrid, que se aprovisionaron de radiales para sacar a algunos pasajeros del amasijo de hierros en el que se quedaron convertidos sus turismos. La Guardia Civil de Tráfico desvió la circulación por la carretera radial de peaje (R-5) para aminorar el embotellamiento posterior. A ésta se accede poco antes del lugar del siniestro. En sentido Talavera también hubo atascos, ya que se reservó con conos el carril derecho para el acceso de los vehículos de emergencia.