| Crónica | Manifestación fallida |
Un alcalde solo contra ETA
Un velatorio en Ponferrada hizo que los vecinos del pueblo de Benuza dieran plantón al regidor en su concentración de repulsa
El alcalde de Benuza, el popular Rafael Blanco, se quedó ayer solo en la movilización que convocó en su pueblo para protestar contra la barbarie de ETA, tras el asesinato del ex edil socialista de Mondragón, Isaías Carrasco. El PP había pactado aplazar las manifestaciones de repulsa y silencio para mañana lunes, pero el alcalde de Benuza, municipio situado en pleno valle bajo del río Cabrera, confesó que nadie le dijo nada, y que, por su cuenta, decidió convocar a los vecinos a las cuatro de la tarde de ayer frente al consistorio. Llegaron las cuatro de la tarde y allí sólo estaba el alcalde, Rafael Blanco. El resto del pueblo se había ido a Ponferrada, al velatorio de un vecino fallecido. Por la mañana, el mandatario popular argumentó que la concentración que había convocado contra ETA la hacía en sábado, principalmente, no para crear controversia e ir en contra de lo pactado, sino más bien porque el lunes, los vecinos del municipio están trabajando en las pizarreras y no podrían acudir a esta concentración de repulsa. «Aquí no aparece ni un alma», se lamentaba el alcalde de Benuza, quien indicaba que estará el lunes en la concentración de protesta convocada por el Ayuntamiento de Ponferrada para el mediodía. Con todo, pese a que ayer sólo se manifestó una sola persona en Benuza, Rafael Blanco no desistía en su mensaje y empeño: «Esto es un acto de repulsa contra estos indignos, que no se merecen estar en la sociedad», al tiempo que se solidarizaba con la familia del ex concejal fallecido, y también con el PSOE. Blanco también disculpaba a los vecinos de su municipio, puesto que, según dijo, muchos de ellos no se enteraron de la convocatoria porque no le había dado tiempo a repartir bandos por los pueblos.