Denuncian que Fomento está colocando un sistema en los guardarrailes que es «muy peligroso»
Los moteros critican que el tubo para proteger las vallas no está homologado
Los ensayos prueban que a 25 kilómetros por hora ya mata al conductor, según Mutua Motera
Uno de los sistemas de protección para motoristas aprobado por el Ministerio de Fomento y que la Dirección General de Carreteras está instalando en la red viaria estatal «no cumple con los requisitos mínimos» de seguridad. Se trata de un tubo de acero que cubre los postes que sujetan los guardarrailes y que en teoría debería absorber el impacto tras producirse una salida de vía. Sin embargo, los ensayos realizados por la Asociación Mutua Motera en un centro autorizado revelan que el sistema tubular no cumple los criterios de homologación al provocar la muerte de un motorista cuando éste impacta a 25 km/h y no a 60, velocidad mínima exigida por la normativa europea. Este «demoledor» resultado de las pruebas realizadas en un centro de investigación de transportes de Valladolid, conocido como Cidaut, ha llevado a la Asociación Mutua Motera (AMM) a exigir su «inmediata retirada» en aquellos tramos de carreteras contemplados en el plan de guardarrailes de Fomento, que promete mejorar la seguridad de las barreras convencionales en los dos próximos años. «El sistema tubular aprobado en 2004 no ha pasado pruebas de ningún tipo y el ministerio lo estaba recomendando un poco a palos de ciego, como si se comercializara un medicamento sin estar probado», denunció este martes el presidente de la AMM Juan Manuel Reyes, representante de los motoristas en las reuniones con la DGT y el ministerio de Fomento, responsable de unos 25.000 kilómetros de carreteras de la red viaria. Los moteros han pedido asimismo al ministerio que remita una comunicado a las administraciones autonómicas y provinciales informando de la ineficacia del sistema tubular, y alertan de que en el caso de que éstas decidan instalarlo podría acarrearles responsabilidades penales. Por el contrario, aconsejan que la «única» forma de proteger al motorista es mediante el uso de sistemas de protección continuos, caso de la doble bionda o la chapa metálica que recubre la parte inferior de una barrera convencional. Golpe tres veces mortal Las pruebas realizadas por Mutua Motera no sólo dejan en entredicho el citado sistema de protección, sino que también revela a través de documentos fotográficos las deficiencias de su instalación. Según los moteros, los cilindros que cubren algunos postes son más gruesos de lo reglamentario; deberían estar rellenos de tierra y no lo están; y se han descubierto casos de postes hincados con hormigón, «lo que provoca el efecto contrario en caso de que un piloto choque contra ellos», señala Juan Carlos Toribio, uno de los 17.000 socios. El motorista dio más detalles de las pruebas realizadas con un dumi de 86 kilogramos y aseguró que si la cabeza impacta con el poste a tan sólo 25 km/h provocaría lesiones mortales a la altura del cuello, cuando la normativa exige que un sistema de protección debería salvar la vida en golpes de hasta 60 km/h. «Es un golpe tres veces mortal equivalente a que nos caiga un peso en la cabeza de 1.500 kilos», ejemplificó Toribio.