«Que las administraciones también arrimen el hombro» 1397124194

«Si el Estado pide corresponsabilidad a los constructores, a las instituciones financieras y a los compradores para salvar la situación actual de la vivienda, también debe arrimar el hombro y poner algo de su parte. Tienen que reformar la fiscalidad». Los promotores de vivienda pública consideran que no es de recibo que los pisos de promoción pública tengan que pagar los mismos impuestos por las licencias que los de las viviendas libres. Una situación que no es ni mucho menos la que se ha mantenido en otros tiempos. En los años 90, por ejemplo, la vivienda protegida tenía una bonificación del 50% en el precio de las licencias. Y existen también otros precedentes locales. Por ejemplo, las actuaciones que se llevan a cabo en el casco antiguo leonés cuentan con bonificaciones de hasta el 70%. El caso es que, de momento, las licencias que tienen que pagar los constructores de vivienda pública suponen una repercusión de entre 40 y 50 euros por metro cuadrado. Es decir, por construir una promoción de 130 viviendas protegidas en barrios periféricos de la capital pagarían 240.000 euros. Lo mismo que si esa promoción se realizada «en Santo Domingo». Los promotores también reclaman más flexibilidad para convertir el suelo de construcción de vivienda libre en suelo para pisos protegidos, una medida que ya se aplica en otras autonomías y que puede permitir a los empresarios del sector participar en un mercado que comienza a ser atractivo. Máxime en un momento de especiales dificultades para la venta de vivienda libre. 1397124194