No hay control sobre los controles de la población recién llegada
A la hora de acceder a un permiso de trabajo o residencia ningún inmigrante es requerido sobre controles sanitarios. Si acaso y llegado a una enfermedad que requiera su ingreso hospitalario se le hace un breve historial y una ficha, así que todos circulan con lo puesto, sea bueno o malo.Según los servicios de epidemilogía de la Junta el problema tampoco es de las autoridades autonómicas, sino del Gobierno central, que, a su vez, se limita a facilitarles documentación civil cuando pueden ser legalizados a traves de un contrato laboral y poco más. En la provincia de León la incidencia de la inmigración es todavía mínima, con apenas un 4% del censo provincial de habitantes, incluídos los que aún no están regularizados, pero en extensas áreas del Arco Mediterráneo, Andalucía y Madrid este porcentaje se multiplica hasta por cinco constituyendo un grave problema que va desde la sanidad hasta la enseñanza, pasando por el paro o el gueto de la vivienda en determinadas barriadas. Vacunarse o no y pasar una revisión médica es algo para el inmigrante totalmente voluntario que generalmente sólo depende de una emergencia: por ejemplo, que le pille una enfermedad rara.