«Quiero dar un mensaje de tranquilidad, tengan la seguridad que las cosas saldrán bien»
Rajoy admite que pasa por su momento peor, pero avisa de que no claudicará
El líder del PP tiene aún por delante otro mes y medio de polémica hasta el congreso de Valencia
Sangre, sudor y lágrimas está dispuesto a soportar Mariano Rajoy antes que dar su brazo a torcer. El presidente del partido opositor cree que sus adversarios, externos e internos, buscarán debilitar su liderazgo y le harán sufrir mucho para intentar que desfallezca y claudique. Sin embargo, la renuncia no entra en los planes que preparó tras las elecciones, después de comprobar los movimientos de quienes pidieron su cabeza a continuación de la derrota. «Sé muy bien lo que tengo que hacer y también sé que estoy en el peor momento», confesó recientemente en una conversación con periodistas. En el instante álgido de la bronca interna del partido, cuando se ha quedado solo tras la renuncia de los que fueron puntales de su oposición en la pasada legislatura y con el grupo parlamentario todavía en pie de guerra, Rajoy intentó transmitir este miércoles un mensaje de serenidad a los militantes y votantes populares. «Lo único que tengo que decir a todas las personas que han votado al PP y a todos los militantes del partido es que, efectivamente, es un momento difícil, pero que las cosas las haremos con sentido común y sensatez y que las decisiones las tomarán los compromisarios que representan a los militantes», declaró ante los medios de comunicación tras asistir al homenaje de la Universidad Europea de Madrid a Rogelio Baón, diputado popular fallecido hace unas semanas. «Quiero dar un mensaje de tranquilidad», dijo, e insistió en que «el PP y su dirección han demostrado que saben sobreponerse a circunstancias difíciles y volveremos a hacerlo», añadió. «Tengan la seguridad de que las cosas saldrán bien», puntualizó. Movido por esta convicción, Rajoy sigue el plan que se trazó aquel martes 11 de marzo cuando anunció que seguiría en el cargo y se presentaría como candidato a la reelección en el congreso. Sabe que el tiempo juega en su contra porque todavía le queda mes y medio hasta el congreso.