Miles de vascos acuden a un acto unitario contra ETA, mientras su parlamento debate la tortura a presos

«Por la libertad. ETA no». Bajo este lema miles de personas se concentraron en la Plaza de la Virgen Blanca de Vitoria en respuesta al llamamiento unitario que realizaron todos los partidos alaveses, salvo los de la izquierda abertzale, tras el asesinato a manos de la organización terrorista del guardia civil, Juan Maule Piñuel. Junto a la ciudadanía, mostró su repulsa al atentado contra la casa cuartel de Legutiano, el lehendakari, Juan José Ibarretxe, el presidente del Senado, Javier Rojo, el consejero de Interior, Javier Balza, el líder de los socialistas vascos, Patxi López, así como otros dirigentes de PP, PSE, PNV, Eusko Alkartasuna, Ezker Batua y Aralar. A las siete de la tarde arrancó un acto, cuyo valor reside en el consenso que marcó la convocatoria, ya que hacía mucho tiempo que no se alcanzaba, y concluyó 15 minutos después con aplausos y vivas a la Guardia Civil. Los presentes, algunos de los cuales portaban banderas de España, guardaron al comienzo cinco de minutos de silencio en memoria de Juan Manuel Piñuel. Después, dos jóvenes dieron lectura a un comunicado en el que se condena el asesinato del guardia civil y se expresa la solidaridad con los heridos, la familia de los afectados y la Guardia Civil. Acusaciones al Gobierno Pero horas antes, el Parlamento vasco aprobó una iniciativa en la que acusa al Gobierno central de «amparar sin excepción» y de forma «sistemática» a las fuerzas policiales ante las denuncias de torturas o malos tratos de detenidos, y le pide que cese en la concesión de indultos a agentes condenados por ello. La proposición, presentada por Aralar, se ha debatido pese a que desde el PSE-EE, su portavoz, José Antonio Pastor, ha pedido a esta formación que pospusiese su discusión para no empañar la imagen de unidad que han dado los partidos, tras el asesinato de Juan Manuel Piñuel. Finalmente se ha debatido y ha salido aprobada, con los votos a favor del tripartito PNV-EA-EB, de Aralar y EHAK, y en contra del PP y PSE-EE.