Un café en La Moncloa: un euro
La amabilidad entre Rodríguez Zapatero y Herrera saldó un encuentro en el que los periodistas esperaron a la comparecencia de los protagonistas en las nuevas instalaciones para la prensa
La Moncloa, sección prensa, al menos en apariencia, no es un edificio superinteligente de esos que te metes en una caja hermética que te catapulta al quinto pino y que no tiene ventanas porque si te caes te matas. Pero sí lo suficiente listo como para estar a ras de suelo y ser cómodo. Muy cómodo. Los periodistas que cubren información en las nuevas instalaciones para prensa en la sede de la Presidencia del Gobierno son unos privilegiados. Es un microclima periodístico con bar y todo, que atenúa la espera siempre lenta del momento en el que comparecerán los protagonistas. Pero, en fin, esto es periodismo de salón, nada más y nada menos, en La Moncloa. Y si el caso es como el de ayer, en el que la amabilidad entre José Luis Rodríguez Zapatero y Juan Vicente Herrera es mutua y correspondida, al menos cubrir la información es un paseo. Otro asunto será escribir qué. «¡Qué fashion!», bromea una periodista. «Esto parece una sala de exposiciones», señala otro, mientras llegan a la zona del bar y hay dos sofás sin respaldo de color pistacho y anaranjado. Eso y unas lámparas modernillas son lo más de diseño de unas estancias que, junto a las dos salas de comparecencias, esas que salen en la tele, son un conjunto de armonía entre moqueta, madera, paredes blancas¿ Todo sencillo y funcional. En total, si uno entra en las dependencias de prensa de Moncloa se encuentra con siete plasmas emitiendo imágenes. A la derecha, nueve cabinas de prensa para periódicos y ocho conexiones libres a Internet. A la izquierda, catorce cabinas de radio abren paso para llegar a la sala en la que intervinieron ayer la ministra Elena Salgado y el presidente Juan Vicente Herrera. Salvo zonas intermedias, con algunos sofás, una pantalla que retransmite la comparecencia, una máquina de refrescos y otra de café son el sencillo mobiliario. Y las paredes son todo un muestrario de portadas históricas de periódicos, con un apartado especial para tres victorias electorales: González, Aznar y Zapatero. Y un café en el ambigú de La Moncloa: un euro.