Rajoy elude comentar la remodelación de Aguirre y Soraya recurre al «respeto»

El presidente del PP, Mariano Rajoy, eludió ayer cualquier comentario sobre la remodelación del Gobierno de la Comunidad de Madrid, mientras que la portavoz del grupo popular, Soraya Sáenz de Santamaría, ha pedido respeto a la «opinión» de los consejeros afectados con los cambios. Ambos se han expresado de este modo a su entrada en el Congreso de los Diputados, en donde seguirán el debate para la aprobación del Tratado de Lisboa. Sáenz de Santamaría, quien ha llegado acompañada por el nuevo portavoz de Justicia del grupo, Federico Trillo, ha recordado que los consejeros afectados por los cambios en el Ejecutivo de Esperanza Aguirre han manifestado ya su opinión, que, ha dicho, «hay que respetar». «Ellos han dicho que sus cambios eran razonables, lo han dicho los propios afectados», ha apostillado. Por su parte, Trillo se ha limitado a asegurar que «está muy bien que reduzca el gasto», una de las razones esgrimidas por el Gobierno madrileño para explicar la remodelación. Los cambios propiciarán la reducción de consejerías del Ejecutivo de la Comunidad de Madrid, de 15 a 12. Salen del Gobierno Manuel Lamela, Alfredo Prada, Fernando Merry del Val, Beatriz Elorriaga y Gádor Ongil, y entran el que era portavoz en la Asamblea de Madrid, Antonio Beteta, y el senador José Ignacio Echeverría. Rajoy no ha querido hacer ningún comentario: «Hoy el tema más importante es el fútbol», ha asegurado para responder a los periodistas, quienes, antes de indagar en la remodelación del Ejecutivo de Aguirre, habían pedido al líder del PP un pronóstico del partido que ayer jugaron España y Rusia. Ante la insistencia de los informadores, ha recurrido a la ironía: «Remodelación no hay; he leído que van a jugar los once que han sido titulares. Si lo han hecho bien, lo mejor es que repitan». Por su parte, el diputado del PP Carlos Aragonés ha afirmado en declaraciones a los periodistas que «a bote pronto» le ha sorprendido la remodelación en el Gobierno Aguirre, aunque ha considerado que si los sustitutos «son más válidos, todo será para bien». No obstante, ha admitido que no conocía bien los cambios, por lo que ha rehusado pronunciarse sobre si éstos responden a una venganza de Aguirre. Tras el Congreso del PP que se celebró el pasado fin de semana en Valencia, Aragonés ha afirmado que «los ánimos están más calmados» en el partido y que Rajoy ha tomado «una buena decisión».