«Queda mucho por saber y excavar de la minería del oro en el Teleno» León no ha saldado su deuda con Domergue

La suspensura Estos restos cerámicos pertenecen al suelo de la suspensura, el pavimento suspendido sobre el hipocausto de las termas excavadas en los años 80 por Claude Domergue en Las Rubias. Doble bóveda Una de las características constructivas de las termas de Las Rubias es la doble bóveda del hipocausto, lo que indica la existencia de los baños calientes o caldarium y tal vez baños templados o tepidarium . Las investigaciones sobre la minería del oro en el Teleno, que inició Domergue hace tres décadas, tienen aún muchos frentes por esclarecer. Las últimas aportaciones las ha realizado el profesor de la Universidad de León e ingeniero de Minas, Roberto Matías, que ha documentado una red hidráulica alrededor del Teleno de 135 kilómetros entre la cota 1.400 y la cumbre y nada menos que 90 depósitos de agua. La peculiaridad de las explotaciones auríferas del Teleno es el sistema de laboreo para la extracción del preciado metal: los romanos convirtieron la sierra del Teleno en gigantescas bateas en las que se lavaban los sedimentos auríferos y se obtenía el metal directamente, sin necesidad de fundición. En total, hay documentadas en el Teleno 78 minas sobre una superficie de 38 kilómetros cuadrados, por lo que se trata del «mayor complejo mundial de minería romana» aunque está cercado por los 55 kilómetros cuadrados que ocupa el campo de tiro del Ministerio de Defensa. «Queda mucho por saber y excavar de la minería del oro en el Teleno», asegura Matías, quien, como Domergue, reclama que se completen las excavaciones de los poblados y coronas y minas romanas. «Con una excavación exhaustiva se encontrarían resultados espectaculares», agrega el investigador. Pero los llamamientos que realizan los expertos sobre el valor de la minería antigua en el Teleno son puestos en entredicho por el Ministerio de Defensa, que es el titular del campo de tiro desde 1981, y la Junta tampoco muestra interés por desvelar los tesoros del Teleno. El campo ocupa 6.000 hectáreas de las cuales una cuarta parte es sólo zona de maniobras y el resto zona de impacto. Dentro de esta última -asegura un informe oficial- «se han reservado seis áreas de especial protección en las que está prohibido el tiro debido a la existencia de restos de murias» (formados por su uso como canales de lavado del oro). La primera vez que el arqueólogo francés Claude Domergue vino a León fue en el verano de 1964. Quería conocer Las Médulas, que había descubierto a través de una foto en blanco y negro del Instituto Geológico y Minero de España. «Fue difícil llegar allí», admite. Por supuesto no había carretera y fue andando hasta el lugar acompañado por dos vecinos de Carucedo. «En este paisaje tan pintoresco y misterioso, no entendí mucho de los picachos y las cuevas». Además, la gente hablaba «más de moros que de romanos». Antonio García Bellido le encargó una ponencia sobre el tema en 1968, con motivo del congreso sobre la Legio VII Gemina, y empezó a esclarecer el misterio. En 1970 contempló «la organización y la belleza de aquellos paisajes» desde al aire. Y decidió emprender excavaciones arqueológicas, «en un principio para fechar estas labores». Lo hizo con el apoyo de la Diputación provincial de León, y más en concreto de su presidente, Antonio del Valle, con el de la cátedra de San Isidoro y su rector, Antonio Viñayo, y de la Universidad de Toulousse-La Mirail.Excavó la corona de Quintanilla y de Huerña (1971-1973) y el poblado de Las Rubias, en el Teleno. Para entender mejor los trabajos mineros fue determinante su colaboración con el geólogo Gérard Hérail, quien hizo su tesis sobre del Bierzo. Como pionero en las investigaciones sobre la minería del oro romana en León fue homenajeado recientemente por la Sociedad Española para la Defensa del Patrimonio Geológico y Minero, con motivo del simposio sobre minería histórica del suroeste de Europa donde presentó los resultados de las excavaciones de Las Rubias. Pero ninguna institución, ni la Diputación ni la Junta, participaron en este reconocimiento. Pero León aún puede saldar su deuda con el estudioso francés atendiendo su consejo: proteger, es decir, declarar BIC todo el Teleno.