«Evaluar y escuchar el dolores parte de nuestro protocolo»

Lleva cuatro años coordinando al equipo de psicólogos del 112 de Castilla y León en algunos de los siniestros más importantes que se han vivido dentro y fuera de la comunidad. El último, el accidente del avión de Spanair que, el pasado miércoles, realizaba la ruta Madrid-Gran Canaria y que se cobró la vida de 154 pasajeros. -¿Cuáles son los primeros pasos a seguir en una catástrofe de tal magnitud? - Lo primero es valorar si debemos intervenir o no. En el caso del accidente de Barajas enseguida se vio que la magnitud de lo ocurrido fue mayor de lo que se decía en un principio. Luego, se pasa al periodo de preactivación, en el que te dicen el número de implicados y te piden que te organices y, después, al de preaviso, en el que los coordinadores elegimos a la gente que va a formar parte del grupo. A partir de ahí, esperar la llamada para trasladarte al lugar de la emergencia. - ¿Cuál es la principal labor que asume un psicólogo en un caso como éste? - El trabajo de los psicólogos no es mitigar el dolor, sino evitar que se añadan nuevos elementos a ese sufrimiento. Nosotros hemos estado 24 horas con los familiares que procedían de Castilla y León y nos encargamos de gestionar todos los recursos humanos. -¿Qué es lo mejor que se puede hacer en un caso así? - Evaluar y escuchar el dolor y también permitir y devolver la información. Con esto último me refiero a escuchar a los afectados y a hacerles ver que estás pendiente de ellos. Esta es nuestra pauta de funcionamiento. -¿Hay unas pautas fijas a seguir en estos casos o un protocolo determinado? -Siempre seguimos el mismo procedimiento de actuación. En este tipo de acontecimientos todo está programado. Nada se deja al azar.