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Los excedentes de la UE y los «stocks» de empresas dan de comer a 10.500 leoneses

Publicado por
M. Romero - león
León

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Más de 10.500 ciudadanos de la provincia que no tienen los recursos suficientes para subsistir reciben alimentos excedentarios procedentes de la Unión Europea o de empresas donantes de la provincia a través de los Bancos de Alimentos de León y Ponferrada, organizaciones sin ánimo de lucro basadas en el voluntariado y que tienen como único objetivo el aprovechamiento de la comida sobrante con intención de hacerla llegar a los centros asistenciales y, a través de ellos, a las personas que lo necesitan. Un total de 8.800 beneficiarios viven en el área de León y el resto, en el Bierzo, según los datos facilitados por la secretaria de la entidad para el área de León, Juani Pérez. El almacén desde el que se deriva la comida repartirá a lo largo de todo este año más de 1,2 millones de kilos de comida entre familias necesitadas, de los que 900.000 kilos corresponden al área controlada desde la capital. «Hay muchísima gente que lo necesita, sobre todo en el mundo rural, donde, aunque no nos damos siempre cuenta, hay mucha gente que vive con pensiones muy, muy bajas. La comida, que es lo fundamental, les falta. No todo el mundo tiene el frigorífico lleno». Se pretende el millón de kilos Por esta razón, entre los objetivos de esta entidad a corto plazo está alcanzar el reparto de un millón de kilos de alimentos sólo en el área de la capital, puesto que no se cubren las exigencias reales de toda la población en situación de extrema necesidad. Estas carencias preocupan especialmente a los gestores de los bancos de alimentos, dado que la coyuntura de las familias a las que no llega la ayuda es la antesala que da paso a la marginación y al desarraigo social. Actualmente, el empeño se centra en ayudar a los colectivos más castigados por la pobreza. Por orden, la atención se centró en inmigrantes (28%), mayores (21%), toxicómanos (12%), parados de larga duración (9%), niños y adolescentes (7%) y enfermos terminales (6%), según la estadística facilitada por la Federación de Bancos de Alimentos. Mayores y niños, prioritarios Los criterios de reparto son muchos y muy variados, pero el Banco de Alimentos da prioridad a aquellas entidades sin ánimo de lucro que se dedican al cuidado de personas mayores, niños desamparados, toxicómanos y otros colectivos especialmente desfavorecidos. En segundo plano se entrega comida a los denominados centros de reparto, que gestionan muy diversas entidades y organismos. Del Banco de Alimentos se nutren, por ejemplo, los servicios sociales del Ayuntamiento de León y organizaciones como Cáritas, que después reparten los productos a tenor de sus propios criterios. Los dos bancos de la provincia cuentan con una plantilla de más de 14 personas, todas ellas de carácter voluntario. Se trata, principalmente, de jubilados y jubiladas con alto grado de implicación social que se dedican al aprovisionamiento, almacenaje y reparto de los fondos. Juani Pérez explica que se reparten todo tipo de alimentos. «Los excedentes de la UE -300.000 kilos al año- suelen ser leche y derivados, arroz, pasta, azúcar y galletas, mientras que las donaciones de empresas leonesas son legumbres o, en general, productos no perecederos». Es lo que ocurre con grandes superficies como Carrefour, entidad que realiza importantes entregas de productos próximos a caducar. «Cada vez hay más sensibilización por parte de los empresarios». «Hay muchísima gente que lo necesita. La comida, que es lo fundamental, les falta. No todo el mundo tiene el frigorífico lleno» JUANI PÉREZ, secretaria del Banco de Alimentos de León