La autovía León-Bragança busca apoyo y plazos en la cumbre hispano-lusa

La cumbre hispano-portuguesa será decisiva para León y para su futuro como eje de comunicaciones del noroeste ibérico. La Fundación Rei Afonso Henriques ha remitido a los ministerios de Exteriores de España y Portugal un informe para incluir en la agenda del encuentro Zapatero-Sócrates, que se celebra a finales del 2008 en Zamora, un informe sobre la autovía León-Bragança, a fin de que se concrete el apoyo del Gobierno español a esta vía de comunicación y que se coordinen los plazos con Portugal. Los argumentos son claros: Portugal ya ha licitado el proyecto de Bragança-Río de Onor (límite fronterizo con Zamora) y está previsto que en cuatro años finalicen las obras del túnel de Marao, la mayor infraestructura de la A-4 - IP4 que une Amarante con Vila Real que sacará a Bragança del aislamiento en que ha vivido la región trasmontana. Esta obra, la más complicada y por tanto la más larga y laboriosa, estará terminado en el 2012. La fundación avala la autovía León-Bragança como una «conexión estratégica» para las comunicaciones del siglo XXI tanto para el transporte por carretera entre Portugal y Europa como para la conexión del puerto de Leixoes (Oporto) con los del Arco Cantábrico: Gijón, Santander y Bilbao. Además de vertebrar el noroeste peninsular, el eje enlazaría desde Burgos con la ruta al nordeste español y, añade, se convertiría en un eje estratégico de largo alcance favoreciendo la intermodalidad pues «aunque el eje Oporto-Irún no cuenta con una eficaz alternativa ferroviaria, uniría cuatro líneas de ferrocarril». La fundación también hace suyos los argumentos en defensa de las poblaciones intermedias beneficiarias de la autovía como Bragança, Puebla de Sanabria, La Bañeza y Santa María del Páramo que tendrían la oportunidad de convertirse en «nudos de comunicaciones terrestres y como con secuencia de ello en polos logísticos que verían reforzada su indiscutible potencial para sedes de industrias y servicios». Los efectos positivos sobre el desarrollo económica de estas comarcas del suroeste leonés, Sanabria y el nordeste trasmontano se consideran muy significativos puesto que se trata de regiones «actualmente deprimidas y sin claras alternativas de futuro». La fundación reclama que el Gobierno español adopte la decisión de su ejecución en coordinación con la comunidad autónoma y que los gobiernos español y luso armonicen los tiempos «para evitar distorsiones». El documento reivindicativo, que incluye ocho puntos vitales para los territorios fronterizos, es fruto del consenso entre ayuntamientos leoneses y zamoranos con la Cámara Municipal de Bragança, la fundación hispano portuguesa, que tiene sede en Zamora, y la Asociación de Amigos de Portugal en España, radicada en León. La reivindicación de la León-Bragança se pone en parelelo y con la misma importancia que la del enlace de Bragança con la autovía del Duero, en construcción, a través de Alcañices, tramo en el cual el gobierno portugués también ha adelantado al español. Llegar al PEIT La autovía León-Bragança todavía no ha sido incluida por el Gobierno en el Plan de Infraestructuras Terrestres (PEIT) pese a los compromisos verbales, es la segunda de las ocho reivindicaciones de este colectivo social y político de cara al próximo encuentro entre los jefes de Gobierno de España y Portugal, José Luis Rodríguez Zapatero y José Sócrates. El eje León-Portugal es «la forma más rápida, más corta, más barata, con menor impacto ambiental y, en definitiva, más racional para completar un corredor internacional que una Oporto y su área de influencia con el centro y el norte de Europa a través de Irún», subraya la Asociación Técnica y de Municipios por la Autovía León-Bragança. La asociación considera esta autovía, junto con la de Ponferrada-Orense, como una vía de comunicación decisiva para que León se convierta en un auténtico «nudo de comunicaciones» del noroeste peninsular. De hecho, es el único tramo que falta para unir la autopista A4 y la vía rápida IP4 (Oporto-Vila Real-Bragança) con las españolas A231, AP1 y A8 (León-Burgos-Vitoria-Irún) ahora que el Gobierno portugués ya adjudicó el tramo de 25 kilómetros del túnel de Marao, entre Amarante y Vila Real, que es la obra de más envergadura de todo el eje transeuropeo. Por otro lado, la Junta de Castilla y León ha incluido en el Plan Regional de Carreteras 2008-2020 la transformación en autovía del tramo León-La Bañeza, de 41,7 kilómetros, con una inversión estimada de 104 millones de euros aunque no se establecen plazos para su ejecución. Según el consejero de Fomento, Antonio Silván, este tramo se realiza «con la vista puesta en Bragança», dado que desde La Bañeza la carretera continúa a Puebla de Sanabria. Pero el plan de carreteras no contempla el itinerario León-Portugal como parte de los grandes corredores para conectar la comunidad con otras regiones y con Europa: el itinerario transeuropeo Portugal-Francia pasa, para la Junta, por Salamanca, Valladolid y Burgos, de manera que la autovía León-Burgos no es aprovechada como infraestructura de transporte internacional en los planes autonómicos. El plan de carreteras de Castilla y León para los próximos doce años considera el eje León-Puebla de Sanabria como uno de los «itinerarios regionales» diseñados para servir a «un tráfico de largo recorrido dentro de la comunidad y que a su vez atiendan la comunicación de los núcleos de población más importantes». En la misma categoría se encuentran los ejes Ponferrada-Miranda de Ebro, Palencia-Guardo, Zamora-Segovia, Salamanca-La Fregeneda, Palencia-Aranda, Almazán-Gómara-Ágreda, Cuéllar-Íscar-Olmedo-Medina del Campo-Alaejos-Toro, Segovia-Aranda y Valladolid-Medina del Campo. LEÓN-LA BAÑEZA Plan de Carreteras de la Junta de Castilla y León 2008-2020. Tramo León-La Bañeza. Kilómetros LA BAÑEZA-FRONTERA Se reclama que el Gobierno central asuma este tramo de 91 km.