UGT convierte en albergue-museo las casas del pueblo de Villaseca y Santa Lucía

Defender el patrimonio sindical y la cultura minera, y a la vez contribuir a la recuperación económica y social de dos de las comarcas más deprimidas a causa de la crisis del carbón, es el doble objetivo del proyecto que tiene previsto convertir las casas del pueblo de UGT en Villaseca de Laciana y Santa Lucía de Gordón en una mezcla de albergue de turistas y museo minero. Un proyecto que inicialmente se centró en la recuperación de documentos y útiles mineros, y sobre todo en la rehabilitación de los históricos edificios, con el objetivo de convertirlos en museos que fuesen foco de atracción turística; pero al que la realidad del coste de mantenimiento de estas infraestructuras ha transformado en una mezcla de museo y negocio hotelero que intente extraer los propios recursos con los que mantenerse. «No se trata de obtener beneficio económico, pero tampoco de cargar a la organización con un gasto más. Y está claro que la Junta de Castilla y León tiene demasiado patrimonio que mantener ya como para firmar un convenio más en este sentido con nosotros», explica Arturo Fernández, secretario general del sindicato en León. A falta de que se apruebe definitivamente en la Junta la modificación del proyecto inicial, y de que se determine si la iniciativa accederá a los fondos del Plan del Carbón a través del apartado de fundaciones o del de proyectos singulares, el coste total de la obra rondará los 1,2 millones de euros. La casa del pueblo de Santa Lucía, más grande, podría acoger alrededor de un centenar de plazas para dormir; y la de Villaseca la mitad. Doble objetivo UGT pretende con esta iniciativa, por un lado, contribuir al desarrollo de dos de las zonas mineras más deprimidas en la actualidad. «El predominio de la industria del carbón, la población dispersa y con malas comunicaciones, los déficits de equipamientos, el gravísimo deterioro del medioambiente, constituyen un escenario que lleva a todos los analistas a señalar la enorme dificultad de conseguir la localización de empresas y la reactivación de estas comarcas mineras», señala el Proyecto de rehabilitación del patrimonio histórico-sindical de la minería de Castilla y León . En las dos localidades señaladas «estos problemas llegan a extremos preocupantes». Por otro lado, el museo reflejaría «la lucha incesante por la que el sindicalismo, los trabajadores y la sociedad de las zonas afectadas principalmente han tenido que pasar a lo largo de varias décadas. Sería un documento de enorme valía en el que nos serviremos del pasado para afrontar el futuro de la mejor manera posible». El análisis encargado por el sindicato concluye que «si se protege y conserva, el patrimonio sindical puede convertirse en fuente generadora de riqueza y en foco de atracción parar nuevas iniciativas empresariales». Una tendencia que cuenta con antecedentes de éxito a nivel tanto nacional como internacional, «pero que se ha desarrollado principalmente en países avanzados como Japón, EE.UU., Canadá y en la Unión europea». En concreto las tres minas museo de Lewarde en Francia, la de Wieliczka en Polonia y la de Kerkrade en Holanda reciben más de 100.000 visitas al año. A nivel nacional destacan iniciativas como la del Museo de la Minería y la Industria de El Entrego, en Asturias, que ha superado ya el millón de visitantes. «Como se puede observar, señala el informe después de un exahustivo repaso por las iniciativas de este tipo en Europa y en España, existen antecedentes que muestran que los museos de la minería son una herramienta útil para la recuperación de las zonas mineras deprimidas».