El adiós a Carabanchel enfrenta a partidarios y detractores

La Plataforma por un Centro para la Paz y la Memoria en la antigua cárcel de Carabanchel lamentó que Instituciones Penitenciarias «borre la memoria histórica» con el derribo de la prisión, que comenzó ayer alrededor de las 14.00 horas. «El comienzo de la demolición confirma las sospechas de los vecinos, que sabíamos que era inminente en cuanto vimos las primeras grúas, aunque desde Instituciones Penitenciarias tratasen de negarlo o llamarlo de otra forma», ha explicado uno de los portavoces de la Plataforma, Pedro Casas. Así mismo, ha anunciado que hasta el domingo, ex reos y vecinos acamparán a las puertas de la prisión porque, según el portavoz, aún «es posible» conservar una parte del edificio para crear un centro para la paz y la memoria. Casas ha criticado el proyecto de Prisiones de crear un espacio para la memoria penitenciaria que «ya estaba incluido en el protocolo de intenciones que firmaron en junio el Ministerio del Interior y el Ayuntamiento de Madrid». Por otra parte, ocho asociaciones vecinales integradas en la Coordinadora de Asociaciones de Latina han pedido a la Plataforma por un Centro para la Paz y la Memoria que «deje de retrasar con sus actuaciones» la construcción de un hospital. «Queremos que se deje de manipular por parte de una representación vecinal minoritaria el tema de los terrenos de la cárcel y no se retrase más la construcción del hospital», ha explicado la representante de los vecinos, Emilia Ortiz. Además, asegura que «la mayoría» de los vecinos del distrito quieren una solución «a la falta de equipamientos sanitarios», ya que ésta «ha sido una reivindicación histórica». Sin embargo, matiza que las asociaciones «defienden el recuerdo de las personas represaliadas en la antigua prisión».