Una decena de inmigrantes intentaron colarse por la zona que sufrió las últimas riadas
Tres agentes heridos al repeler un nuevo asalto a la valla de Melilla
Es el tercer intento de los «sin papeles» de penetrar en la ciudad autónoma en tres días
Tres agentes de la Guardia Civil sufrieron ayer lesiones de carácter leve al tratar de evitar la entrada de una decena inmigrantes en Melilla. Los miembros del Instituto Armado fueron atendidos por magulladuras, después de intentar repeler, junto a policías marroquíes, el tercer asalto a la valla de seguridad en los últimos días. El grupo de subsaharianos trató de pasar a Melilla por el cauce del Río de Oro, en la zona comprendida entre los puestos fronterizos de Mariguari y Farhana. Según la Delegación del Gobierno, nada más producirse la refriega se activó el dispositivo de seguridad habitual para detectar «si algún inmigrante ha logrado entrar». Precisamente, Mariguari es una de las localidades marroquíes donde más inmigrantes se esconden con el sueño de dar el salto a España. La valla fronteriza que separa Melilla de Marruecos quedó fuertemente dañada por la tromba de agua que cayó el pasado domingo y que rompió más de 30 metros de la alambrada. En el primero de los asaltos a la frontera, el pasado lunes, un grupo de unos 65 inmigrantes trató de cruzar a la carrera primero por el puesto de Beni Enzar, aunque no lo consiguieron. Posteriormente, alrededor de medio centenar se dirigieron hacia uno de los arroyos y, aprovechando que las compuertas de la valla estaban dañadas por las lluvias del domingo, consiguieron entrar a la ciudad autónoma. Fueron interceptados 37 de ellos.