La ciudad del conocimiento

«Se están haciendo muchos esfuerzos para que este pueblo se convierta en la ciudad del conocimiento. Y lo vamos a conseguir, porque tenemos muchos parámetros que son favorables». El director de la Escuela de Ingenierías Industrial e Informática de la Universidad de León, Ángel Alonso, realizó ayer ante los alumnos del Observatorio Tecnológico HP-ULE un análisis de las condiciones por las que la ciudad se encuentra en una situación privilegiada para posicionarse en cabeza de la I+D en tecnologías de la información y la comunicación. «Una situación de la que el Centro de Competencia es un buen ejemplo, algo hecho en León para el mundo». Alonso llamó a sacudirse «el provincianismo» para pedir que venga a León «mucha gente de fuera» a apoyar lo que considera que puede ser un auténtico revulsivo para la economía y el desarrollo local en las próximas décadas. Entre los parámetros que el director de la escuela considera básicos para afianzar esta potencialidad se encuentra la apuesta por la formación. «Llevamos décadas en las que la gran inversión social de esta provincia ha sido la formación, se ha decidido invertir en neuronas y ahora llegan los resultados». A mayores, existe «la voluntad política para canalizar todos estos proyectos en realidades». Como ejemplos citó la apuesta del gobierno central por sentar las bases del conocimiento en León a través del Inteco; y de la Junta con el Centro de Supercomputación. Una «nítida apuesta política por León» que se ve complementada por la decisión de varias empresas de ubicar sus centros de investigación en la ciudad. «Entre ellas, nada más y nada menos que Hewlett Packard, líder mundial del sector». Otro de los factores que según Alonso juega a favor de esta consolidación de León como ciudad del conocimiento es la coyuntura económica internacional. «La sociedad ya no se fía tanto del sector especulativo, y se fija más en las empresas que crean valor añadido, conocimiento». Un asunto en el que incidió también la vicerrectora de Campus, Victoria Seco, quien recordó que en la carrera de Ingeniería Industrial e Informática «no existe paro, y además no logramos cubrir la demanda de plazas que nos hacen desde las empresas». Seco reclamó el «apoyo incondicional» de las administraciones públicas para desarrollar proyectos como el Parque Tecnológico y el Centro de Supercomputación; y abogó por intensificar la relación entre la Universidad y estas empresas.