Los empresarios de discotecas denuncian una «caza de brujas» de Gallardón
La muerte del joven Alvaro Ussía a las puertas de la madrileña discoteca El Balcón de Rosales ha destapado la situación del ocio nocturno madrileño, lleno de irregularidades, que ha derivado en numerosos cierres de discotecas, mayor vigilancia a los servicios de seguridad y duras declaraciones. Desde la industria se considera que se está llevando a cabo una «caza de brujas» en lugar de asumir la «corresponsabilidad» que tiene el Ayuntamiento. Desde el PSM denunciaron la pasividad la Comunidad de Madrid y anunciaron una investigación «exhaustiva» sobre lo ocurrido. «Pensemos que hace dos días se estaba hablando de la necesidad de 'encarcelar a los criminales que tienen asesinos a sueldo en la puerta de sus establecimientos'», lamentó el representante de empresarios de ocio. Tras un asesinato en el que los supuestos autores «están ya en la cárcel», se «deben depurar las responsabilidades en el contexto en que se ha producido, pero no entrar en una escalada de declaraciones desafortunadas». Ordenación del ocio Pizcueta demandó que, si se tienen que producir ceses puntualmente, éstos se lleven a cabo, pero sin llegar a instalarse «en un conflicto en el que el principal problema que parece que tenga la sociedad española son los locales de ocio». Y es que, a su juicio, se ha entrado en una situación en la que «se ha venido a criminalizar globalmente a un sector que de forma activa viene implicándose en la ordenación del ocio». El portavoz de la asociación madrileña consideró que el Ayuntamiento se ha «instalado en una cierta caza de brujas, cuando lo que tocaría sería asumir, desde la corresponsabilidad, todo lo que tiene que ver con la regulación del ocio y la diversión», indicó. Además, lamentó que toda la culpa se le está echando al sector, en lugar de buscar también responsabilidades en la administración: «Parece que los problemas y la ordenación del ocio sean por la desidia de los empresarios». Asimismo, Pizcueta destacó que el del ocio es un sector que «mayoritariamente» no origina problemas pero mostró su «satisfacción» por que exista «un mecanismo de filtro para saber qué tipo de personas» pueden desempeñar este trabajo.