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| Reportaje | Año de bienes |

Aguinaldo a los embalses

La nieve sobre nieve en las cabeceras de las presas leonesas sirve para modificar todos los planes de austeridad que cabían para el nuevo año hidrológico; Riaño ya tiene más agua que en el 2007

Vista del embalse de Riaño, ayer al mediodía

Publicado por
L. Urdiales
León

Creado:

Actualizado:

redacción

La nieve llega con un regalo envuelto para los recursos hídricos de León. Llegó hace más de un mes y medio e insiste. Como si fuera a petición del presidente de la CHD, un organismo que ya iba a echar cuentas para afrontar la próxima crisis con el embalse del Esla en carnes vivas. La presa de Riaño, que terminó exhausta el año hidrológico, refleja el potencial de León como fábrica de agua (que luego no aprovecha, aunque eso es harina de otro costal). Pasó de un tercio se su capacidad a superar el 40% de reservas sobre el total. Y todo porque los 50 litros por metro cuadrado en forma de nieve en la última semana más otros diez que cayeron en lluvia en la cabecera de la montaña oriental leonesa han acelerado la caída del caudal a los valles de la trasera del embalse. Riaño cuenta así con 13 millones de metros cúbicos de agua más que en diciembre del 2007. Y hay más datos que elevan las perspectivas de incremento: cada segundo entran 38 metros cúbicos al embalse. En esa progresión, en tres semanas estará cubierta la mitad de la capacidad del embalse. Una posibilidad que no más allá del 30 de octubre parecía una quimera, más que un cálculo. Cada invierno generoso con la nieve en la montaña es sinónimo de primaveras y veranos plácidos para el presidente de la CHD, que ya puede hacer planes para acudir a las comisiones de desembalse con algo más que un papel vacío.

Así se gestiona. Y también puede que el aguinaldo de la nieve cambie radicalmente la posición de reservas arruinadas en el Luna. Es factible, porque este embalse alcanzará en poco más de una semana las reservas del año pasado. Y tiene el respaldo de más de 40 litros por metro cuadrado que han caído en los valles del Luna desde la pasada semana. Al Porma no le faltarán en los próximos meses detalles de buen año, año de nieves.

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