Un anciano con la cadera rota está tres días en casa hasta ser rescatado

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Con la tensión alta, desorientado, la cadera rota, desnutrido, deshidratado y dolorido. Así hallaron los bomberos a un anciano de 84 años en su domicilio de Valencia después de tres días en el suelo tras tropezar en el comedor de su casa. Afortunadamente, se había dejado la estufa encendida, si no, con las temperaturas tan bajas que se han registrado en la Comunidad Valenciana en los últimos días, el desenlace podría haber sido peor.

Luis S. G. vive solo en el número 3 de la Plaza Andújar, en el barrio valenciano de En Corts, y su único contacto familiar está a casi 200 kilómetros, en Albacete. Su hermana, también de avanzada edad, suele llamarle por teléfono con frecuencia para ver cómo se encuentra y, gracias a ese contacto continuo, se alarmó al comprobar que ni el domingo ni el lunes respondía. Primero insistió antes de dar la voz de alarma, pero el segundo día llamó a la policía.